Madrid, 1 jun (.).- Moody's ha mantenido la nota para la deuda a largo plazo de MásMóvil (MC:MASM) en B1 con perspectiva estable, dentro de las consideradas en grado especulativo, también llamadas bono basura, un año después de haberle otorgado ese escalón la primera vez que se sometió al escrutinio y justo antes de conocerse la opa.
El informe en el que se mantiene la nota de la operadora de telecomunicaciones tiene fecha del domingo 31 de mayo, y ha sido difundido por la agencia de calificación el día siguiente, este lunes, que es cuando se ha desvelado la opa amistosa de KKR (NYSE:KKR), Cinven y Providence por todo el capital de la compañía española, con una prima de más del 20 % sobre el valor en bolsa del viernes.
Según Moody's, MásMóvil Ibercom ha demostrado una ejecución exitosa de su expansión desde que fue fundada en 2006, con un crecimiento en el negocio de telecomunicaciones fijas y móviles; una estrategia de precios inteligente y no disruptiva; un alza constante de ingresos, y un éxito de su estrategia multimarca.
No obstante, también ha reflejado entre las debilidades que tiene demasiada exposición a los tres operadores que son más grandes en España (Telefónica (MC:TEF), Orange (PA:ORAN) y Vodafone (LON:VOD)) en la defensa de las cuotas de mercado y que tiene flujo de caja libre (FCF) negativo en 2020, aunque añade que es probable que se vuelva positivo en el futuro.
Además, otro desafío crediticio que advierte Moody's es su historial de importantes fusiones y adquisiciones financiadas con deuda, así como que tiene cierto grado de "riesgo de evento" y que ha hecho operaciones predominantemente móviles, con capacidad de oferta de convergencia limitada y sin intención de invertir en contenido enriquecido.
La perspectiva estable refleja la expectativa de Moody's de que MásMóvil reducirá el apalancamiento y lo mantendrá en 2021 dentro de los umbrales para la calificación actual de B1, gracias a un ebitda al alza.
Moody's ha considerado que MásMóvil podría ascender de escalón en la próxima calificación si cumple con su plan de negocios con un rendimiento operativo mejorado y mantiene la tendencia de ingresos, aunque podría rebajar su nota si su desempeño operativo se deteriora; si lleva a cabo grandes fusiones y adquisiciones financiadas con deuda, o si la liquidez se deteriorase significativamente.
En el informe, Moody's ha descrito que a diciembre de 2019 Telefónica, cuya nota es Baa3 (aprobado bajo) estable, tenía en España el 45,5 % de cuota por ingresos; seguida por Orange, Baa1 (aprobado alto) estable, con el 15,9 %; y Vodafone, Baa2 (aprobado) negativa, con el 14,7 %, mientras MásMóvil es cuarta con el 5,7 %.
La cuota en la banda ancha fija minorista de MásMóvil alcanzó en diciembre el 11,5 % -cuando un año antes era del 8 %-, con Movistar (Telefónica) en el 35 %; Orange, 28 %; Vodafone, 20 %; Euskaltel (MC:EKTL), 4 %, y el resto, 1 %.
En móvil, la compañía cuyo consejero delegado es Meinrad Spenger ha llegado al 16,6 %, con Orange en el 26 %, Movistar en el 25 %, Vodafone en el 20 %, y otros en el 12 %.
Moody's ha recordado que MásMóvil anunció este 2 de marzo la adquisición de Lycamobile, un operador virtual español centrado en el segmento prepago con millón y medio de líneas de teléfono, por una contraprestación en efectivo de 372 millones de euros.
La transacción, que será financiada por deuda bancaria y está sujeta a aprobación regulatoria, Moody's ve probable que se cierre en el segundo semestre de este año, lo que "generará sinergias considerables".
La agencia de calificación espera que MásMóvil continúe generando FCF negativo en los próximos 12 meses, debido a un mayor gasto de capital.
Además, vaticina que las inversiones se reducirán de 2021 a 2022, con un impulso entonces a un FCF positivo a partir de 2021, lo que sustentará el desapalancamiento, y sin pagos de dividendos esperados en los próximos dos años.