Morgan Stanley esbozó su estrategia de divisas, recomendando a los inversores que tomen posiciones cortas en el par EUR/GBP, con un objetivo fijado en 0,82.
El análisis de la firma sugiere que esta operación probablemente se beneficie de una combinación de carry ajustado a la volatilidad y de un repunte previsto en el impulso del crecimiento económico del Reino Unido.
La estrategia de Morgan Stanley se basa parcialmente en la expectativa de una creciente divergencia política entre el Banco de Inglaterra (BoE) y el Banco Central Europeo (BCE). La firma anticipa que esta divergencia, especialmente en las políticas de tipos de interés, podría dar lugar a una ampliación de los diferenciales de tipos que podría ejercer presión a la baja sobre el tipo de cambio EUR/GBP.
Las recomendaciones de Morgan Stanley se producen en medio de un complejo panorama financiero mundial, en el que las políticas monetarias de los bancos centrales desempeñan un papel fundamental a la hora de configurar las valoraciones de las divisas y las expectativas de tipos de interés.
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