Río de Janeiro, 22 jul (EFE).- El principal organismo
antimonopolio de Brasil condenó hoy por unanimidad a la cervecera
AmBev a pagar una multa récord de 352 millones de reales (unos 176
millones de dólares) por perjudicar la competencia.
La multa, impuesta por el Consejo Administrativo de Defensa
Económica (Cade), fue más del doble de la que hasta ahora era la
mayor infracción ordenada por el organismo, contra la siderúrgica
Gerdau, por valor de 156 millones de reales (unos 78 millones de
dólares).
Según el Cade, la empresa AmBev, multinacional belgo-brasileña
que produce las cervezas Skol, Brahma y Antarctica, entre otras, fue
multada por exigir la exclusividad de sus productos en los puntos de
venta e inhibir así la comercialización de otras marcas por medio de
programas de fidelización.
Para el organismo antimonopolio, esta situación ha perjudicado a
otras empresas del sector cervecero y también al consumidor.
Así, según el relator del proceso contra AmBev, Fernando de
Magalhaes Furlan, los consumidores son "los más perjudicados" ya que
"no tendrán ni la variedad ni los precios deseados".
Furlan criticó también que la empresa "siempre actuó en el límite
de la legalidad" y argumentó que como líder de un sector en el que
ocupa hasta el 70% del negocio, "tiene responsabilidad sobre actos
que repercuten en todo el mercado".
El valor de la multa corresponde al 2% de la facturación bruta de
la empresa en 2003, fecha anterior al comienzo del proceso contra la
compañía.
Además, el Consejo determinó que la compañía debe poner fin a sus
programas de fidelidad que exigen exclusividad bajo pena de una
multa diaria de 53.200 reales (unos 27.000 dólares).
El proceso contra AmBev fue abierto en 2004 tras una denuncia de
la empresa Schincariol, competidora en el sector cervecero, por los
programas de fidelización de puntos de venta.
En la denuncia, Schincariol acusaba a AmBev de ofrecer a bares,
supermercados y otros locales acuerdos de exclusividad, descuentos y
bonificaciones para que los puntos de venta comercializasen los
productos de esta empresa.
Según Schincariol, los programas de la multinacional
belgo-brasileña redujeron la participación en el mercado de las
cervezas Nova Schin y Kaiser en un 20%, mientras que las marcas de
la empresa denunciada incrementaron su presencia en un 8,5%.
Por su parte, AmBev alegó que sus programas de fidelización no
sólo eran legales sino que beneficiaban al consumidor y al punto de
venta. EFE