Madrid/Moscú, 20 dic (EFE).- Repsol ha comprado finalmente un 10 % de su capital que estaba en manos de Sacyr, su principal accionista, por 2.572 millones, en una operación que ha permitido a la constructora cerrar la refinanciación de su crédito y acabar su pacto con Pemex.
A falta de un día para que expirase el plazo para refinanciar el crédito de 4.900 millones que sustentaba la participación del 20 % de Sacyr en Repsol, el presidente de la petrolera, Antonio Brufau, ha anunciado la solución en Moscú: compraban un 10 % de su capital a Sacyr para dejarlo, en principio, en autocartera.
En principio, porque la intención de Repsol es encontrar inversores institucionales que quieran comprar ese paquete. Y espera conseguirlo en meses, según han avanzado los directivos de Repsol en una conferencia con analistas para explicar la operación.
Adicionalmente, parte de estas acciones podrían ser utilizadas cómo fórmula de remuneración al accionista.
La petrolera, que tomó esta decisión en una reunión de su Consejo el pasado domingo, ha comprado sus acciones a 21,066 euros con un 5 % de descuento sobre el precio de cierre de ayer para desbloquear un proceso de refinanciación que "había producido un escenario de incertidumbre".
Desde Moscú, donde ha sellado un acuerdo con la rusa Alliance, Brufau ha subrayado que la compra no alterará los planes estratégicos de la petrolera.
Lo que sí ha alterado por ahora ha sido la estructura accionarial de Repsol, donde Caixabank ha pasado a convertirse de nuevo en el principal accionista, con el 12,86 %, por delante de Sacyr, que ahora tiene el 10 %, y la petrolera estatal mexicana Pemex, que mantiene un 9,4 %, que ahora tienen que contabilizar por separado sus acciones en Repsol.
El pacto entre Sacyr y Pemex, sellado en agosto con el entonces presidente de Sacyr Luis del Rivero al frente, se ha roto después de que, tal y como establece una de sus cláusulas, una de las dos empresas ha vendido más de la mitad de su participación. A esta hora, Pemex no ha hecho comentarios sobre la operación.
La operación también ha conllevado cambios en el Consejo de Repsol, donde la constructora se quedará sólo con un asiento, ocupado por Juan Abelló, y del que saldrán el expresidente de Sacyr, Luis del Rivero, y Jose Manuel Loureda.
Y ha permitido que Sacyr refinancie la mitad restante de su crédito en Repsol, 2.447 millones de euros, hasta el 31 de enero de 2015.
Tras la destitución de Del Rivero el pasado mes de octubre, los esfuerzos de Sacyr, ahora dirigida por Manuel Manrique, y Repsol se habían centrado en encontrar una solución para la refinanciación del crédito.
Entre los escenarios planteados estaba la venta de un paquete de entre el 8 % y el 10 % a un tercero o que este porcentaje pasara a manos de Repsol como autocartera.
Entre los últimos candidatos para comprar una parte del paquete de Sacyr habían sonado la china Sinopec o algún grupo latinoamericano. La brasileña Petrobras ha negado hoy tener interés en adquirir parte de la participación.
Ayer, Sacyr, que ha sido asesorado para la refinanciación por Lazard, mantuvo una reunión con la banca acreedora donde ya se perfiló con más fuerza la opción de que fuera el propio Repsol el que comprara las acciones para colocarlas posteriormente.
La clave está ahora en quién se hará con este paquete, cuánto tiempo tardara en cerrarse la operación y a qué precio.
Las acciones de Sacyr y Repsol, cuya cotización ha estado suspendida casi todo el día, han cerrado con subidas del 8,32 % en el caso de la constructora y del 2,48 % en el de la petrolera.EFE