Investing.com - El dólar gana posiciones frente al refugio seguro del yen japonés este martes ante las esperanzas de que Estados Unidos y China se estén acercando a un acuerdo preliminar para resolver su prolongada guerra comercial, lo que ha suscitado temores en torno a una ralentización económica global.
El dólar sube un 0,26% frente al yen hasta el nivel de 108,82 a las 9:19 horas (CET), ampliando el avance del 0,4% registrado el lunes.
Estos últimos días, Pekín y Washington han mostrado unos alentadores indicadores de progreso de las conversaciones comerciales.
Reuters ha informado de que China está presionando al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para que elimine más aranceles de los que implementó en septiembre como parte de la "fase uno" de un acuerdo comercial que se firmará a finales de este mes en un lugar aún por determinar.
Ambos países han impuesto aranceles sobre los productos del otro en una guerra comercial que se ha prolongado durante 16 meses.
"Puede que haya ciertas expectativas de que Estados Unidos pueda posponer los aranceles restantes, que entrarán en vigor el 15 de diciembre. Pero si va más allá y revierte los aranceles ya existentes, eso no sólo beneficiaría a la economía, sino que también haría que la tregua pareciera más permanente", ha dicho Yukino Yamada, estratega principal de Daiwa Securities.
El índice dólar, que sigue la evolución de esta moneda con respecto a una cesta de otras seis divisas principales, se mantiene estable en 97,32, justo por debajo de los máximos de una semana registrados en 97,47 durante la noche.
El euro sube con respecto al billete verde hasta el nivel de 1,1133, mientras que la libra esterlina avanza hasta 1,2895.
El dólar australiano también gana posiciones, subiendo un 0,43% hasta el nivel de 0,6912 pues los inversores se sienten más cómodos corriendo riesgos.
El martes anterior, el Banco de la Reserva de Australia decidió mantener los tipos de efectivo en el 0,75%, mínimos históricos, y reiteró su preocupación en torno al gasto de los consumidores. También ha dicho que es probable que los tipos de interés sigan siendo bajos durante un período prolongado.
Muchos economistas creen que el Banco de la Reserva de Australia recortará los tipos al menos una vez a principios del año que viene para contribuir a reactivar la inflación y una economía ralentizada.