Fráncfort (Alemania), 3 jun (EFE).- El productor automovilístico
alemán Volkswagen ve un conflicto de intereses en el fabricante de
componentes austríaco-canadiense Magna, del que es cliente, por la
compra de Opel.
El portavoz de Volkswagen Michael Brendel dijo hoy que "desde
Volkswagen observaremos con gran atención este desarrollo".
"Para el rescate de Opel se colocaron en gran medida medios
fiscales por lo que esperamos que con ello se logre un resultado de
éxito, sólido".
Adam Opel recibió ayer la primera ayuda financiera estatal con el
primer tramo de un crédito puente por un monto de 300 millones de
euros (423 millones de dólares).
El crédito total que proporcionarán el Gobierno alemán y los
Estados federados asciende a un total de 1.500 millones de euros
(2.115 millones de dólares).
Magna y sus socios rusos Gaz y Sberbank van a adquirir un 55 por
ciento en Opel, mientras General Motors mantendrá otro 35 por ciento
y el restante diez por ciento quedará en manos de la plantilla,
según el acuerdo aprobado el pasado fin de semana con el Gobierno
alemán. EFE