Por Joseph Cassinelli
MADRID (Reuters) - El Real Madrid se prepara para viajar a Girona donde el domingo disputará un partido de Liga con el telón de fondo de la crisis política en Cataluña, mientas el Gobierno central se prepara para intervenir la autonomía tras el referéndum ilegal del 1 de octubre.
Girona, situada a 100 km de Barcelona, es uno de los bastiones independentistas de Cataluña, y el actual presidente del gobierno catalán, Carles Puigdemont, fue en su día alcalde de la ciudad.
Mientras aumenta el número de manifestaciones en la región, se espera un fuerte sentimiento antiespañol en las gradas del estadio de Montilvi, el campo del equipo recientemente ascendido a Primera División.
El Madrid, que el jueves disputa contra el Fuenlabrada un partido de Copa del Rey, se ha recuperado de un mal comienzo de temporada y ocupa el tercer lugar en Liga tras haber ganado cinco de sus últimos seis partidos en todas las competiciones.
El entrenador blanco, Zinedine Zidane, dice que ni sus jugadores ni él se sentirán afectados por lo que probablemente sea una fría bienvenida. "Nosotros vamos a jugar un partido de fútbol, vamos a tener la seguridad que siempre hemos tenido", dijo el técnico en una rueda de prensa.
"Va a ser un partido de fútbol y nada más. Solo tenemos que pensar en preparar el partido como ya hacemos siempre y no pensar en lo que pueda suceder fuera del estadio" añadió Zidane.