KALININGRADO, Rusia (Reuters) - Croacia venció 2-0 a Nigeria con un gol en propia puerta de Oghenekaro Etebo y un penal de Luka Modric, en uno de los partidos más duros e impredecibles del Mundial y que dejó a los europeos como líderes del Grupo D.
La precisa definición de Modric a los 71 minutos desde el punto penal dejó la sensación de que el partido estaba cerrado, pero el hecho de que ningún croata logró anotar en una situación de juego es evidencia de lo desviado de sus remates.
Si bien Croacia dominó el encuentro por largos períodos, tuvo problemas para penetrar la defensa de Nigeria y no logró dar con el arco mediante los remates desde fuera del área.
El resultado dejó a Croacia al frente de su grupo, después de que Argentina -su próximo rival- empatara inesperadamente 1-1 con Islandia.
De cara a ese encuentro el próximo jueves en Nizhni Novgorod, Modric dijo a periodistas: "Va a ser un partido difícil, quizás contra el favorito de nuestro grupo. Ellos tienen calidad, pero esta victoria fortalecerá nuestra confianza".
"Será duro, seguro, pero ellos tendrán que jugar para ganar debido al marcador de hoy que nunca esperaron", agregó.
El técnico de Nigeria, Gernot Rohr, se refirió a la debilidad de su equipo en las jugadas de pelota parada y dijo que ahora necesitan una victoria ante Islandia el próximo viernes.
"Todo es posible para la clasificación (...) seguimos sonriendo, estamos decepcionados e intentaremos mejorar en el próximo partido", afirmó.
"Desde luego es importante sumar al menos cuatro puntos si quieres clasificar. Ahora estamos a un punto del segundo. Todo está en nuestras manos. Tenemos el equipo más joven de la Copa del Mundo, dejemos que aprendan de eso y lo haremos mejor", agregó.
Croacia abrió el marcador a los 32 minutos, luego de que el mediocampista nigeriano Etebo desvió un cabezazo del delantero Mario Mandzukic.
A los 71 minutos, el defensor nigeriano William Troost-Ekong derribó a Mandzukic justo frente al árbitro, envolviendo con ambos brazos al atacante dentro del área. Modric remató con confianza a la esquina inferior izquierda del arco y dejó sin opciones al portero Ikechukwu Ezenwa.
Cuando se le preguntó si estaba nervioso después de que Messi falló un penal para Argentina frente a Islandia, el capitán croata respondió: "Estaba totalmente concentrado en anotar desde el punto penal. Gracias a Dios logré marcar - no hay más que decir", sostuvo.