Por Michael Church
KAZÁN, Rusia (Reuters) - El iraní Saeid Ezatolahi intentará dejar atrás la decepción por su gol anulado contra España cuando su equipo busque una victoria ante Portugal que le permita alcanzar los octavos de final de la Copa del Mundo por primera en su historia.
España obtuvo los tres puntos el miércoles en el Kazan Arena gracias a un fortuito gol de Diego Costa que dejó al equipo de Carlos Queiroz obligado a vencer al actual campeón de Europa en su último partido del Grupo B en Saransk el lunes para avanzar a octavos de final.
"Toda nuestra concentración está puesta en Portugal y tenemos una tarea muy difícil por delante, pero estamos decididos a obtener esta victoria", dijo el centrocampista, quien se perdió la victoria de Irán sobre Marruecos en el debut por suspensión. "Trabajaremos duro para obtener esta victoria y clasificar para la próxima ronda".
Ezatolahi lamentó lo ocurrido ante la "Roja".
"El resultado contra España podría haber sido mejor, merecíamos más, pero es por eso que decimos que el fútbol es un juego hermoso. A veces, el balón no entra en la portería".
"Pero actuamos brillantemente para ser un equipo tan joven. Tenemos un gran entrenador y pudimos devolverle su confianza y no decepcionarlo tras su arduo trabajo", agregó.
Irán adoptó un enfoque ultra defensivo hasta que Costa finalmente rompió su tenaz resistencia a los 54 minutos, cuando desvió con su rodilla el despeje de un rival para superar al arquero Alireza Beiranvand.
El gol impulsó a los iraníes a abrirse y el equipo de Queiroz causó muchos problemas a los campeones mundiales de 2010 en su búsqueda de un empate.
Ezatolahi pensó que había empatado cuando barrió el balón hacia el arco después de que la defensa española no pudo despejar un tiro libre de Rezaeian, pero el árbitro Andrés Cunha descartó la anotación tras consultar el VAR.
"Pensé que era gol y durante esa fracción de segundo estaba pensando en todo el trabajo duro que había hecho y, dado que en el primer juego estaba suspendido, estaba bajo mucha presión", dijo el jugador de 21 años. "Dios me ayudó a jugar bien, pero desafortunadamente no pudimos marcar, el gol no contó".
"Ahora estamos un poco tristes, pero seguiremos trabajando duro para el próximo juego para hacer felices a nuestros hinchas".