Su razonamiento es el siguiente. "Por cómo funciona la banca privada, el papel de los comerciales, autoproclamados 'banqueros privados', es clave en la captación y retención de clientes".
En este sentido, añaden que "dado el reparto de los distintos niveles de clientes entre los distintos "clusters" de bancos privados (el caché de las entidades está en gran medida vinculado a su origen geográfico) la figura personal del comercial es de vital importancia en un modelo muy basado en la confianza".