Madrid, 19 jul (.).- La agencia de medición de riesgos Fitch espera que los fondos Macquarie y Wren House -gestora de activos del fondo soberano de Kuwait (KIA)-, utilicen los 750 millones de euros obtenidos de la reciente venta de activos de Viesgo a Repsol (MC:REP) para cancelar toda la deuda pendiente, unos 725 millones de euros.
Repsol informó el pasado 27 de junio de que había alcanzado un acuerdo con los fondos Macquarie Infrastructure and Real Assets (MIRA) y Wren House Infrastructure, propietarios de Viesgo, para adquirir los negocios no regulados de generación de bajas emisiones de la eléctrica y su comercializadora de gas y electricidad por 750 millones de euros.
Fitch dice que espera que Macquarie y Wren House utilicen alrededor de 750 millones de euros en ganancias de la venta para cancelar al cierre de la transacción toda la deuda pendiente, que a finales de 2017 incluía alrededor de 600 millones de euros de préstamos intercompañía y un préstamo a plazo de 125 millones de euros, este último sujeto a un cambio de la cláusula de control.
En el caso de Repsol, la agencia de medición de riesgos espera que financie la adquisición a través de efectivo disponible y no mueva ninguna deuda hacia el negocio de los activos adquiridos, ya que a 31 de marzo de 2018 la petrolera tenía alrededor de 4.300 millones de euros en efectivo y depósitos a corto plazo.
Esta cifra no incluye ningún beneficio de la venta de su participación del 20 % en Gas Natural Fenosa (MC:GAS), ahora Naturgy, acordada en febrero de este año.
En opinión de Fitch, las necesidades de financiación para el desarrollo de los planes de crecimiento para Viesgo se abordará por la matriz o se beneficiará de las garantías corporativas de Repsol.
La venta de los activos de Viesgo a Repsol está pendiente de las aprobaciones regulatorias y se espera que quede cerrada antes de que acabe 2018.