Bruselas, 17 dic (EFE).- El Eurogrupo buscará hoy avanzar en un compromiso a Diecisiete sobre el mecanismo único de reestructuración y liquidación bancaria de cara al Ecofin de los Veintiocho del miércoles, para lo que tienen que resolver además la cuestión de si habrá un cortafuegos que respalde al fondo único de resolución.
El objetivo de las dos reuniones es llegar a un acuerdo político antes de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) del jueves y viernes en Bruselas.
Los ministros de Finanzas de la eurozona parten de un texto redactado la semana pasada en el Ecofin que cuenta con el apoyo total de los cinco grandes países del euro -España, Francia, Alemania, Italia y Holanda- pero todavía no con el de los demás Estados, que han pedido un poco de tiempo para sopesar las opciones.
El texto no incluyó aún la cuestión del cortafuegos, un tema espinoso que los ministros han preferido negociar por separado en las reuniones del martes y el miércoles y que debe responder a la pregunta de ¿qué hacer si el fondo único todavía no dispone de suficientes recursos pero quiebran grandes bancos?
Alemania solo quiere tocar el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) en última instancia y considera que en todo caso los países tendrían que pedir un préstamo a la entidad, como ha hecho España.
El documento de la semana pasada ya ha recibido las críticas del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, quien dijo el lunes ante la Eurocámara que está "preocupado por que el proceso de decisión sea demasiado complejo y los mecanismos de financiación no sean los adecuados".
El texto refleja las exigencias de Alemania, en el sentido de que da un mayor peso a los países miembros, limita a los bancos sistémicos la decisión de resolución a nivel europeo y dificulta el acceso al fondo común.
La autoridad única de resolución, formada por unos consejos ejecutivo y plenario, tomará las decisiones sobre la liquidación de un banco, mientras que la Comisión Europea (CE) solo ejercerá un control posterior.EFE
El objetivo de las dos reuniones es llegar a un acuerdo político antes de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) del jueves y viernes en Bruselas.
Los ministros de Finanzas de la eurozona parten de un texto redactado la semana pasada en el Ecofin que cuenta con el apoyo total de los cinco grandes países del euro -España, Francia, Alemania, Italia y Holanda- pero todavía no con el de los demás Estados, que han pedido un poco de tiempo para sopesar las opciones.
El texto no incluyó aún la cuestión del cortafuegos, un tema espinoso que los ministros han preferido negociar por separado en las reuniones del martes y el miércoles y que debe responder a la pregunta de ¿qué hacer si el fondo único todavía no dispone de suficientes recursos pero quiebran grandes bancos?
Alemania solo quiere tocar el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) en última instancia y considera que en todo caso los países tendrían que pedir un préstamo a la entidad, como ha hecho España.
El documento de la semana pasada ya ha recibido las críticas del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, quien dijo el lunes ante la Eurocámara que está "preocupado por que el proceso de decisión sea demasiado complejo y los mecanismos de financiación no sean los adecuados".
El texto refleja las exigencias de Alemania, en el sentido de que da un mayor peso a los países miembros, limita a los bancos sistémicos la decisión de resolución a nivel europeo y dificulta el acceso al fondo común.
La autoridad única de resolución, formada por unos consejos ejecutivo y plenario, tomará las decisiones sobre la liquidación de un banco, mientras que la Comisión Europea (CE) solo ejercerá un control posterior.EFE