Emilio López Romero
Nueva York, 13 ene (EFE).- El mal sabor de boca que dejó la semana pasada el informe de empleo y el temor a que la Reserva Federal acelere de forma abrupta el recorte de sus estímulos llevó hoy a Wall Street a vivir su mayor caída en casi cuatro meses.
La principal referencia del parqué neoyorquino, el Dow Jones de Industriales, cerró hoy con un fuerte descenso del 1,09 % hasta los 16.257,94 puntos, su peor jornada desde que el 20 de septiembre pasado retrocediera el 1,19 %.
Incluso peor fueron las cosas en los otros dos indicadores del parqué neoyorquino, ya que el selectivo S&P 500 perdió este lunes el 1,26 % hasta los 1.819,94 enteros, mientras que el tecnológico Nasdaq se dejó el 1,47 % hasta las 4.113,3 unidades.
La creación de empleo en diciembre pasado estuvo por debajo de lo previsto por los analistas, lo que según los expertos puede llevar a la Reserva Federal a mantener en los términos actuales su programa de estímulos monetarios para impulsar el crecimiento.
Sin embargo, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Atlanta, Dennis Lockhart, alertó hoy de que el instituto emisor continuará reduciendo el volumen de ese estímulo si la recuperación se consolida.
Estas palabras volvieron a crear miedo en los mercados, donde se teme una hipotética reducción abrupta del estímulo tras el recorte parcial de 10.000 millones de dólares que ya aplicó en diciembre pasado y que generó un repliegue generalizado de los mercados.
En una semana en la que se esperan resultados de algunos gigantes de Wall Street, el día estuvo plagado de noticias empresariales, como los planes de la farmacéutica Merck de comenzar los estudios clínicos de un nuevo tratamiento contra el melanoma.
Asimismo, la distribuidora de bebidas alcohólicas Beam se disparó casi un 25 %, tras anunciarse su compra por la japonesa Suntori por unos 16.000 millones de dólares, mientras Google subió en la clausura, justo antes de conocerse que comprará Nest Labs por unos 3.200 millones.
Al cierre de los mercados también se supo que la distribuidora de televisión por cable Charter Communications ha hecho una oferta por el gigante de la comunicación Time Warner Cable por unos 61.300 millones de dólares. EFE