París, 3 abr (EFE).- El crecimiento de la economía francesa, que se ha ralentizado al 0,1 % en el primer trimestre, volverá en el segundo al 0,3 %, el mismo ritmo que tuvo en los últimos tres meses de 2013, según el Instituto Nacional de Estadística (INSEE).
El vector de crecimiento entre enero y marzo ha sido la variación de existencias de las empresas, que han aportado tres décimas al producto interior bruto (PIB) y han permitido compensar el retroceso de dos décimas de la demanda interior, según el informe trimestral de coyuntura presentado hoy por el INSEE.
Entre abril y junio el avance de la actividad va a basarse íntegramente en la demanda interna, gracias en particular a la recuperación del 0,6 % del consumo privado.
El comercio exterior va a tener un impacto nulo en los dos trimestres, en un contexto de ascenso con una cadencia similar de las exportaciones y las importaciones.
Los autores del informe hicieron notar que la recuperación de la economía francesa va a ser más débil que la de la zona euro en su conjunto, cuyo PIB debería incrementarse un 0,4 % en el primer trimestre y un 0,3 % en el segundo.
Se espera que entre enero y junio se generen 53.000 empleos, después de los 66.000 del segundo semestre de 2013 y la tasa de paro debería permanecer estable en el 10,2 %.
La inflación interanual, por su parte, se situará en el 0,9 % en junio (un 0,5 % la subyacente, que excluye la energía y los alimentos), frente al 0,7 % en diciembre.
Paralelamente, el instituto estadístico prevé que tras el descenso del poder adquisitivo constatado en la segunda mitad del ejercicio pasado, en 2014 se recuperará un 1 % entre enero y marzo y un 0,1 % entre abril y junio.
Teniendo en cuenta las previsiones del INSEE para el primer semestre, la economía francesa subiría un 0,7 % en el conjunto de 2014 si hubiera un estancamiento en la segunda mitad del año.