MADRID, 29 oct (Reuters) -El operador aeroportuario español Aena (MC:AENA) dijo el viernes que el impacto financiero de una ley recientemente aprobada que vincula los ingresos por alquileres de los arrendatarios minoristas, como las tiendas libres de impuestos y los restaurantes, al número de pasajeros sería menor de lo que había estimado anteriormente.
La ley, aprobada a principios de este mes y que se aplica con carácter retroactivo desde el 15 de marzo de 2020 -cuando comenzó el estado de emergencia por la pandemia en España- se espera que cueste a Aena 1.350 millones de euros (1.570 millones de dólares), frente a una estimación anterior de 1.500 millones de euros.
"Cancelaremos las facturas y devolveremos el dinero a nuestros inquilinos comerciales", dijo el director financiero José Leo a los inversores en una conferencia telefónica tras la publicación de los resultados del tercer trimestre.
El mayor operador aeroportuario del mundo, que cuenta con 46 aeropuertos, incluido el madrileño Adolfo Suárez Barajas, en su red española, registró un aumento del 6,5% en los ingresos comerciales en los nueve primeros meses del año en comparación con el mismo periodo de 2020, pero su pérdida neta se amplió un 15%, hasta los 123,7 millones de euros.
Leo dijo que esperaba que la mayor parte del tráfico de ocio a través de los aeropuertos de Aena volviera en el verano de 2022 "si las cosas van bien". Añadió que el principal problema de la compañía era el aumento de los costes de la energía, sin que la cadena de suministro mundial y la crisis de las materias primas hayan tenido todavía ningún impacto.
Si no hay más complicaciones por la pandemia, Leo dijo que el tráfico en el primer trimestre de 2022 debería mejorar respecto al 40% de actividad de 2019 que se espera este año, ya que las aerolíneas refuerzan su capacidad y apuestan fuerte por la temporada de invierno.
La asociación de aerolíneas españolas ALA dijo recientemente que espera más vuelos durante el periodo invernal que antes de la pandemia, pero advirtió que el aumento de los precios de la energía y la escasez de combustible podrían poner en peligro esa recuperación.
Aunque el turismo internacional en España se mantiene en niveles cercanos a la mitad de lo que era antes de la pandemia, el número de visitantes internacionales en septiembre aumentó un 400% con respecto a hace un año, y el Gobierno espera que una mayor difusión de la vacuna a nivel mundial y unas normas de viaje más claras atraigan a más viajeros el próximo año.
(1 dólar = 0,8584 euros)
(Reporte de Clara-Laeila Laudette; edición de Nathan Allen, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdansk)