La Habana, 17 may (.).- La compañía aérea Air China retomó este viernes los vuelos entre Pekín y La Habana, con escala en Madrid y dos frecuencias semanales, tras una pausa forzada por la pandemia y la perspectiva de potenciar el turismo hacia la isla caribeña.
Un avión Boeing (NYSE:BA) 787-9 de la principal aerolínea del gigante asiático con 116 viajeros reabrió las operaciones de la ruta que hará los martes y viernes desde Pekín a La Habana, y a la inversa, los miércoles y sábados.
El primer ministro cubano, Manuel Marrero, asistió al recibimiento del vuelo en el aeropuerto internacional de La Habana, junto a los titulares de Transporte y Turismo, Eduardo Rodríguez y Juan Carlos García, respectivamente.
A la par con la reanudación de esta ruta ha entrado en vigor la exención de visado para los ciudadanos chinos que viajen a la isla con pasaportes ordinarios, una decisión anunciada por las autoridades cubanas durante la Feria Internacional de Turismo (FitCuba) a principios de mayo, junto con la participación de China como invitado de honor en la edición de 2025.
Esta reconexión aérea es considerada por representantes de ambas naciones como una oportunidad para incrementar intercambios, promover el turismo multidestino, la comunicación y la cooperación de China con América Latina y el Caribe.
La relevancia de un mercado "emergente" como el de China en las estrategias de desarrollo del turismo en Cuba ha sido resaltada por las autoridades de la isla, que prevén para este año un incremento de los turistas del país asiático.
García refirió recientemente que para estimular ese mercado se diseñan productos y servicios como el mejoramiento de la conectividad a internet en las instalaciones hoteleras, la especialización de los guías en el idioma, y la digitalización de las visas y las reservas de los paquetes turísticos, entre otros.
Según datos oficiales, China ocupaba en 2019 el lugar 13 entre los países emisores de turistas a Cuba, con alrededor de 45.000 anuales. Pero en 2023 apenas llegaron 18.003 visitantes.
La promoción del turismo chino se inserta en la apuesta de las autoridades cubanas de alcanzar los 3,2 millones de visitantes internacionales en 2024 de cara a impulsar la reactivación de este sector estratégico, que no ha logrado despegar cuando el país padece una aguda crisis económica.
Ese objetivo representaría una mejora frente a los 2,7 millones de viajeros de 2023, aunque quedaría por debajo de los 4,2 y 4,6 millones que llegaron en 2018 y 2019, respectivamente.
El sector turístico es el segundo aportador al producto interno bruto (PIB) de Cuba y la tercera fuente de divisas, tras los servicios profesionales y las remesas, según estimaciones de diversos expertos independientes.