Londres, 24 feb (EFE).- El grupo europeo Airbus (PA:AIR) respondió hoy a las expectativas del mercado, al anunciar que el pasado año sus beneficios volvieron a aumentar de forma significativa, en este caso un 15 % respecto a los de 2014, hasta los 2.696 millones de euros.
El presidente, Tom Enders, subrayó en conferencia de prensa que es un resultado "sólido", que se han cumplido "todos los objetivos" financieros que se habían fijado y que abordan el ejercicio de 2016 "con confianza" y se han mantenido las metas que se habían establecido.
Buena muestra de la confianza es el dividendo que se va a proponer a la junta en el mes de mayo, de 1,30 euros por acción, lo que significa un 8 % más que el pasado año.
Una vez más, la fabricación y venta de aviones comerciales volvió a ser el grueso del negocio de Airbus, con un récord de 635 aeronaves entregadas en 2015, que supuso una facturación de 45.854 millones de euros, un 8 % más.
El problema es que el beneficio neto operativo (EBIT) de esta división se redujo un 14 % a 2.301 millones de euros, lo que apenas pudo ser compensado por el alza del 82 % en la de defensa y espacio (a 745 millones) y del 3 % en la de helicópteros (a 427 millones).
Así en conjunto, el EBIT del grupo Airbus únicamente subió un 1 % hasta los 4.086 millones de euros, y la razón principal fueron una serie de cargas excepcionales que pesaron sobre su rentabilidad, empezando por los 635 millones para cubrir el efecto de la devaluación del euro frente al dólar, y que impactó negativamente sobre todo al negocio de aviones comerciales.
A eso se añadió otra provisión -que se había anunciado en los resultados del primer semestre- de 290 millones de euros por los problemas de industrialización del avión de transporte militar A400M que se ensambla en Sevilla (España).
El pasado año se entregaron únicamente 11 de esos A400M, una cifra decepcionante en un programa que arrastra una larga retahíla de reveses (en 2014 había habido otro cargo de 551 millones de euros, y no era el primero), al que se añadió el accidente en mayo de uno de esos aparatos en un vuelo de prueba en Sevilla, que costó la vida a cuatro empleados del fabricante.
Enders hizo hincapié hoy en que se hicieron "muchos progresos" el pasado año con el A400M y por eso confía en que en 2016 se entreguen más de 20 aviones, en un calendario que está en negociación con los países clientes, entre ellos España, que debe recibir el primero en el segundo trimestre.
La otra cara de la moneda de la división de defensa y espacio es el avión tanquero MRTT, que es una adaptación del modelo civil A330 que se produce también en España, en la planta de Getafe.
El pasado año se lograron contratos para 14 de esos aviones de repostado en vuelo (8 para Francia, 4 para Corea del Sur y 2 para Australia), de modo que la cartera total de pedidos es de 49.
Las cargas negativas no recurrentes se compensaron en parte con un par de cesiones, en particular los 748 millones de euros obtenidos con la venta del 18,75 % de Dassault (PA:AVMD) Aviation.
El responsable de la estrategia de Airbus, Marwan Lahoud, confirmó que tienen intención de deshacerse del resto de las acciones de Dassault Aviation que mantienen en su cartera, pero lo harán en función de "las condiciones del mercado", con la vista puesta en conseguir la mayor plusvalía posible.
Enders se mostró satisfecho del comportamiento del negocio de helicópteros, ya que pese al bajón que ha sufrido el mercado de venta de aparatos nuevos por la menor demanda del sector petrolero (uno de los principales clientes) a causa del hundimiento del barril, sus cuentas han sido honrosas.
Las entregas de helicópteros de Airbus cayeron en número un 16 % a 395 aparatos, mientras los ingresos subieron un 4 % a 6.786 millones de euros y el EBIT subió un 3,4 % a 427 millones.
Eso se explica esencialmente por que el grupo europeo ha apostado en los últimos años por dar más peso a los servicios a sus clientes de helicópteros, y eso representó el pasado año un 47 % de los ingresos.
Para 2016, el grupo Airbus confía en lograr un nuevo récord de entregas de aviones civiles, con más de 650, y eso debería permitirle mantener el beneficio neto por acción y el EBIT antes de elementos no recurrentes al nivel del pasado año.