Roma, 12 feb (.).- La aerolínea italiana Alitalia, en administración concursal desde mayo de 2017 por sus graves problemas financieros, corre el riesgo de no poder pagar los sueldos de febrero a sus 11.000 empleados por la situación de "extrema dificultad" que atraviesa, informaron hoy a Efe fuentes cercanas a la compañía.
Alitalia, propiedad actualmente del consorcio Compagnia Aerea Italiana (CAI) al 51 % y Etihad Airways al 49 %, necesita recibir con urgencia los 20 millones de euros prometidos en noviembre por el Gobierno italiano en el paquete de ayudas a empresas penalizadas por la crisis del coronavirus y que aún no le han llegado, según las mismas fuentes.
El Estado italiano ha tratado sin éxito desde 2017 de vender la aerolínea, que no tiene beneficios desde 2002, pero no ha conseguido que un inversor se interese por la totalidad del negocio, mientras que empresas como Lufthansa (DE:LHAG) o EasyJet solo ofrecieron comprar alguno de sus activos.
El pasado marzo, el Gobierno italiano anunció que nacionalizaría la aerolínea con la inyección de 3.000 millones de euros y después procedió a diseñar la configuración de una nueva sociedad que, bajo el nombre de Ita, se haría con los activos de Alitalia, pero el proceso está parado porque, entre otras cosas, despierta dudas en Bruselas, y mientras la aerolínea italiana está agotando su liquidez.
El actual administrador concursal de Alitalia, Giuseppe Leogrande, ha escrito este viernes una carta a los sindicatos a la que ha tenido acceso Efe y en la que se en la que menciona la "extrema dificultad que enfrenta en las últimas semanas", algo que achaca a que la Unión Europea no autoriza todo el dinero que había previsto entregar el Estado italiano en marzo en calidad de compensaciones por la crisis del coronavirus.
La Comisión Europea (CE) ha autorizado al Estado italiano a entregar hasta el momento a Alitalia unos 270 millones de euros de esos 350 millones previstos en marzo como ayudas para empresas con problemas derivados de la pandemia.
Además, Leogrande critica los retrasos en la configuración de la nueva sociedad Ita "como un vehículo con participación pública destinado a la compra de empresas que operan en el sector del transporte aéreo" y pide que se aceleren los tiempos para que se pueda poner fin a la situación de parálisis que vive Alitalia desde hace cuatro años.
El responsable de gestionar Alitalia critica que "la aparición del coronavirus y la paralización sustancial de los viajes aéreos" han castigado ulteriormente a la aerolínea y han comprometido "la posibilidad de concluir con éxito el programa de venta original" y "mejorar su desequilibrio económico".
Alitalia ha recibido en los últimos años dos préstamos estatales para garantizar su operatividad por un total de 1.300 millones de euros, que la Comisión Europea investiga para esclarecer si cumplen con las normativas europeas en materia de ayudas estatales.
Según los medios italianos, la CE ha pedido a Alitalia que no ceda directamente su negocio a Ita porque infringiría la normativa sobre rescates y que en su lugar desarrolle una licitación real, a precios de mercado y abierta a la competencia, para vender sus activos.
De esta manera, se confirmará que Ita es una nueva empresa con discontinuidad respecto a la antigua Alitalia.
Este punto será fundamental si Bruselas confirma que los 1.300 millones de euros recibidos por Alitalia en préstamos eran realmente ayudas del Estado, ya que si esto sucede y la Comisión concluye que Ita es una nueva sociedad, la antigua administración debería devolver las ayudas, algo prácticamente imposible.
Pero si Bruselas estima que Ita es una continuidad de Alitalia, la nueva administración tendría que asumir el pago.