La Laguna (Tenerife), 1 oct (.).- El secretario general de la UGT, Pepe Álvarez, ha dicho este martes que la reducción de la jornada laboral se llevará a cabo "sí o sí", y ha asegurado que si hasta ahora no ha habido acuerdo ha sido porque quienes se oponen tienen un soporte político.
Antes de participar en una asamblea sobre la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas a la semana, Pepe Álvarez ha declarado que la "batalla la vamos a ganar" en la calle, y ha recordado que el PP ha dado "un paso" para hablar de ello porque "sabe que no podrá ocultarse, pues es algo que quieren abordar los trabajadores", mientras que Junts "tendrá que dar explicaciones" a su electorado.
El secretario general de la UGT ha subrayado que los sindicatos tienen que "ganar la batalla" de la opinión pública, pues esto conllevará una mayoría parlamentaria a favor, y esto hará que la CEOE irá a la mesa de negociación "con ánimo de negociar".
Pepe Álvarez ha comentado que antes de las últimas elecciones generales los sindicatos y la CEOE habían avanzado "muchísimo", y también tras los comicios, pero, cree el dirigente de la UGT, la patronal se cerró en banda cuando Junts "parece ser que se comprometió a que no era prioritario" este asunto.
Por ello, Álvarez ha insistido en que tienen que ser capaces de hacer comprender a los trabajadores que "si se quiere, se puede" conseguir la reducción de la jornada laboral, que, ha reiterado, no perjudica a la productividad.
Ha recordado que la mayoría de los países del entorno europeo tienen jornadas inferiores y la productividad es superior, y ha indicado que también hay que hablar de las horas extraordinarias, así como del control horario y del abuso que se hace de la contratación a tiempo parcial.
"Por supuesto" que habrá más movilizaciones, ha comentado el secretario general de la UGT, quien ha recordado que la jornada laboral no se ha tocado desde el punto de vista legal desde hace unos 40 años.
Además, ha aludido a que cuando se implantaron las vacaciones desde la patronal se decía que era una locura, y que cuando se aprobó la subida del salario mínimo interprofesional se habló de que "se iba a acabar el mundo".
En cuanto a que se debe tener en cuenta a la pequeña empresa, ha apuntado que para eso está la mesa de negociación, y ha precisado que no todas son iguales.
(foto)