París, 1 oct (.).- El fondo de inversión francés Ardian entró este jueves en la batalla por el control de Suez, con el respaldo de su dirección, al anunciar que tiene intención de formar un consorcio para comprar el 29,9 % del capital que está en manos de Engie (PA:ENGIE), el mismo que quiere adquirir Veolia (PA:VIE) con su opa, hasta ahora hostil.
En un breve comunicado, Ardian explicó que su intención es "constituir un consorcio de inversores privados y públicos, con predominio francés, para realizar este proyecto y lanzar una oferta pública amistosa".
El fondo, que dijo haber comunicado a Engie su interés por la participación que tiene en Suez, aseguró contar con el "apoyo" del consejo de administración de esta última empresa y del administrador que representa a los trabajadores.
A ese respecto, Suez confirmó en otro comunicado ese apoyo para la compra del 29,9 % en manos de Engie y el lanzamiento inmediato de una opa en metálico por el resto del capital "en las mismas condiciones".
La víspera, Suez había reiterado su oposición a las intenciones de su eterno rival Veolia y señalar que las propuestas de su nueva oferta "siguen siendo vagas" y no garantizan el interés de los accionistas ni de las partes implicadas.
Eso después de que Veolia revisara al alza también el miércoles su opa al elevar el precio que pagaría por las acciones que tiene Engie de 15,50 a 18 euros.
Eso significa que la participación del 29,9 % pasaría a costarle 3.400 millones de euros, en lugar de los 2.900 millones en su proposición inicial del 30 de agosto.
Otra novedad es que, a petición de Engie, Veolia ha aceptado prolongar la validez de su opa hasta el próximo lunes, cuando la fecha límite inicialmente prevista era el 30 de septiembre.
En ese tiempo, Veolia debe concretar el compromiso de no lanzar una opa sobre el restante 70,1 % del capital de Suez a menos que sea amistosa, es decir, que tiene que lograr el visto bueno del consejo de administración de Suez.
Sobre esas últimas maniobras de Veolia y Engie, Suez señaló que va a trabajar "en un espíritu de diálogo abierto recomendado" por el Gobierno francés, que tiene un papel clave ya que el Estado es el primer accionista de Engie.