Buenos Aires, 12 jun (.).- Argentina anunció este viernes que prorroga hasta el próximo 19 de junio el plazo para que acreedores privados se adhieran a la oferta que lanzó en abril para reestructurar bonos de ley extranjera por 66.238 millones de dólares.
Esta es la cuarta vez que el país amplía la fecha límite para que sus acreedores den su consentimiento a la propuesta de canje que formalizó el pasado 21 de abril ante la Comisión de Valores de los Estados Unidos (SEC, acrónimo en inglés).
La nueva prórroga se produce cuando restan pocas horas para que expire en la tarde de este viernes el plazo y mientras el Gobierno argentino trabaja para presentar una nueva oferta ante la SEC, con mejoras respecto a la de abril, mayoritariamente rechazada por los acreedores.
La anterior prórroga se había anunciado el 1 de junio después de que el Gobierno y los grandes grupos de acreedores liderados por fondos de inversión intercambiaran propuestas de canje alternativas con vistas a llegar a un acuerdo.
"Desde la extensión anterior de la invitación, la República (Argentina) continuó manteniendo proactivamente debates con distintos grupos de inversores, adelantó posibles ajustes a la invitación y recibió comentarios de inversores, así como también otras sugerencias sobre los diferentes caminos para mejorar los cobros", dijo este viernes el Ministerio de Economía en un comunicado.
En este sentido, el Gobierno aseguró que "se encuentra analizando estas sugerencias para maximizar el apoyo de los inversores, al mismo tiempo que preserva sus objetivos de sostenibilidad de la deuda".
"Argentina cree firmemente que una reestructuración de deuda exitosa contribuirá a estabilizar la condición económica actual, mitigando las restricciones a mediano y largo plazo sobre la economía de Argentina, las cuales fueron creadas por la actual carga de deuda, y reencauzando la trayectoria económica del país hacia el crecimiento a largo plazo", señala el comunicado.
Añadió que el Gobierno y sus asesores pretenden "aprovechar" esta nueva extensión del plazo para mantener abiertas "las discusiones y permitirles a los inversores continuar contribuyendo con una reestructuración de deuda exitosa".