México, 1 feb (EFE).- El organismo mexicano antimonopolio rechazó la intención del grupo Televisa de invertir unos 1.600 millones de dólares para hacerse con el 50 por ciento de la empresa de telefonía móvil Iusacell, informó hoy esta última empresa.
La decisión fue anunciada por Iusacell en un comunicado tras recibir hoy una notificación de la Comisión Federal de Competencia (CFC) que da cuenta de la resolución que fue adoptada el pasado 24 de enero y que estaba pendiente de ser entregada a las partes.
Televisa anunció el pasado 7 de abril una inversión de 37,5 millones de dólares en capital y otros 1.565 millones en deuda convertible para hacerse con el 50 por ciento de Iusacell, la tercera empresa en el mercado de la telefonía móvil mexicano.
Iusacell es propiedad del Grupo Salinas, del que también depende TV Azteca, el segundo grupo de televisión privada de México, después de Televisa.
El comunicado de Iusacell dice que la CFC adoptó la decisión "en una votación dividida" del pleno de ese órgano. "En opinión de esta compañía, se trata de una decisión que no fomenta la competencia en el mercado de la telefonía en México", según la nota.
Iusacell califica como "cuestionable" la resolución del órgano regulador "dado que está basada en suposiciones y presunciones hipotéticas".
Además, agregó el comunicado, "ignora los efectos nocivos de la alta concentración que hay en el mercado de telecomunicaciones y los altos costos que, por ello, pagan los consumidores mexicanos".
Iusacell, que está al borde de la quiebra y necesita urgentemente financiación, tenía un 4,3 por ciento de la cuota del mercado de telefonía móvil de México, al cierre de 2010, después de Telcel (70 por ciento) y Movistar (22 por ciento).
El mismo comunicado anuncia que Iusacell revisará en detalle la resolución y hará llegar a la CFC o "a la instancia legal competente los argumentos para que se analice a fondo la conversión de las obligaciones de Televisa en acciones de Iusacell".
La decisión de la comisión puede ser recurrida ante los tribunales.
El comunicado de Iusacell fue dado a conocer poco después de que la CFC anunciara que aún estaba informando a las partes de su decisión del 24 de enero, que sólo sería comunicada públicamente cuando se completara ese proceso de información.
Desde esa reunión del 24 de enero se venía conjeturando sobre la decisión que se había adoptado, con versiones que indicaban que se había aprobado la operación, que se había rechazado o que se había autorizado con restricciones.
Poco después de que se conociera la decisión de Televisa de invertir en Iusacell, Nextel, la cuarta empresa de telefonía móvil de México, interpuso una denuncia contra la operación por supuestos daños a la competencia.