Miriam Burgués
Washington, 16 jun (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, viaja este domingo a Los Cabos (México) para participar en la cumbre del G20, donde se centrará en abordar los desafíos que enfrenta la eurozona y en intentar acercar posturas con China y Rusia en temas de permanente desacuerdo.
Obama partirá de Chicago, donde se encuentra pasando el fin de semana en compañía de su esposa, Michelle, y de sus dos hijas, y prevé aterrizar en Los Cabos en la noche del domingo, según ha adelantado la Casa Blanca.
Al margen de las sesiones de trabajo de la cumbre, que se celebrará el lunes y el martes e inevitablemente estará protagonizada por la crisis europea, Obama tendrá reuniones bilaterales con los presidentes de México, Felipe Calderón, de Rusia, Vladímir Putin, y de China, Hu Jintao.
Obama también podría sumarse al encuentro que prevén mantener el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy; la canciller alemana, Angela Merkel; el mandatario francés, François Hollande, y el primer ministro italiano, Mario Monti.
La mala situación en Europa está contribuyendo a ralentizar la recuperación económica en EE.UU. y esto, a su vez, está haciendo mella en la popularidad de Obama, que se jugará la reelección en noviembre.
En Los Cabos, Estados Unidos "espera escuchar a los líderes europeos sobre el progreso de sus esfuerzos para estabilizar el sistema bancario y promover el crecimiento", ha indicado Michael Froman, asesor para Asuntos Económicos Internacionales de Obama.
El enfoque que ha venido defendiendo el Gobierno de Obama y que volverá a exponer en esta cita es estimular el crecimiento y la creación de empleo en el corto plazo, en línea con lo que plantean en Europa mandatarios como Hollande.
La reunión de Los Cabos "no será la última palabra sobre la zona euro", advirtió Froman, al recordar que los líderes europeos tienen una cumbre importante a finales de mes en Bruselas.
Según la subsecretaria de Asuntos Internacionales del Tesoro de EE.UU., Lael Brainard, el acuerdo alcanzado para la recapitalización del sistema bancario español ha sido "un paso clave" y es importante que tanto España como Italia, que están llevando a cabo "reformas difíciles", puedan "seguir endeudándose a un precio asequible".
No solo Europa tiene que seguir trabajando para enfrentar la crisis, sino que economías emergentes presentes en el G20 como China e India, cuyo crecimiento está ralentizándose, también "pueden tomar medidas adicionales", apuntó Froman.
De la "coordinación de acciones para sostener un crecimiento mundial equilibrado" hablarán precisamente Obama y Hu en su encuentro bilateral programado para el martes al término de la cumbre, de acuerdo con el consejero adjunto de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Ben Rhodes.
Los dos líderes abordarán también la situación en Corea del Norte, tras su fallido lanzamiento de un cohete de largo alcance en abril, y el programa nuclear iraní, dos asuntos en los que Obama busca un mayor compromiso y cooperación por parte de China.
En el caso de Rusia, Obama aspira a acercar posturas para avanzar hacia una "posición común" sobre el conflicto en Siria.
La reunión entre Obama y Putin se celebrará el lunes antes del comienzo de la cumbre y girará en torno a Siria, partiendo de la base de que ambos países tienen "sustanciales diferencias" sobre cómo poner fin a la violencia en esa nación.
EE.UU. sigue apostando por una transición política que, según Rhodes, implica "necesariamente" la salida del poder del presidente sirio, Bachar Al Asad, algo a lo que Rusia se ha mostrado reacia.
Antes del encuentro con Putin, Obama se reunirá con Calderón, el anfitrión de la cumbre y que visitó la Casa Blanca el pasado abril, para revisar los progresos en la relación bilateral.
La de Los Cabos será probablemente la última cita internacional de Obama, metido ya de lleno en la campaña por la reelección, hasta después de los comicios de noviembre en EE.UU. EFE