Shanghái (China), 8 feb (EFE).- El uso mundial del yuan, la moneda china, como divisa para el comercio internacional aumentó un 50 % durante 2012, según el llamado índice de la globalización del yuan, que elabora mensualmente el banco británico especializado en el mercado asiático Standard Chartered Bank.
La entidad anunció además un nuevo récord de uso de la moneda china en diciembre, cuando el indicador creció, desde el mes anterior, un 2,8 % hasta su mayor marca hasta la fecha, 748 puntos, por encima de los 728 que registró en noviembre.
Esto fue posible sobre todo gracias al aumento de las reservas en yuanes acumuladas en Hong Kong, cuyo comercio con el mercado chino es cada vez mayor.
Según el informe presentado por el banco, el índice que elabora ganó un 50 % en 2012 a pesar de la inestabilidad financiera mundial y la ausencia de expectativas de un encarecimiento de la moneda china.
El índice utilizado tiene en cuenta los depósitos bancarios en yuanes en todo el mundo, así como los bonos en yuanes comprados desde fuera de China (los llamados bonos "dim sum", como los aperitivos cantoneses) y otros tipos de certificados, contratos comerciales y pagos con la moneda del gigante asiático.
Esta misma semana los bancos de Taiwán comenzaron a operar, de manera histórica, también con yuanes, por lo que la isla se sumará al índice mensual a partir de los datos de febrero.
China planea que su capital económica de facto, Shanghái, se convierta en uno de los principales centros comerciales, financieros y logísticos del mundo para 2020, con un funcionamiento en todos estos sectores de acuerdo a los estándares internacionales y una influencia mundial como las de Nueva York, Londres o Hong Kong.
Para ello planea también que Shanghái se consolide para 2015 como el principal centro mundial para el comercio, la clarificación y el establecimiento de precios del yuan.
El Standard Chartered Bank, especializado en dar servicios en Asia, además de África y Oriente Medio, abrió en enero su sucursal número 100 en China, por lo que tiene la tercera mayor red de sucursales de un banco extranjero en el país, por detrás del HSBC (británico) y el Bank of East Asia (Hong Kong).
Cerca del 80 % de los ingresos del banco, que cuenta con casi 90.000 empleados en China, aunque su sede está en Londres, y que fue creado en sus orígenes para operar en las antiguas colonias británicas, provienen de sus actividades en el continente asiático. EFE