Davos (Suiza), 20 ene (EFE).- El presidente del banco suizo UBS (VX:UBSN), Axel Weber, ha dicho en el Foro de Davos que pese a la ralentización del crecimiento y a las turbulencias vividas en su bolsa, China tiene aún "mucha munición" para estabilizar su economía y, de paso, la del resto del mundo.
Weber ha concedido hoy una entrevista a Bloomberg Televisión en el Foro Económico Mundial de Davos, durante la que ha asegurado que el país asiático ha tomado ya medidas correctoras y ha puesto en marcha estímulos, aunque quizás "se han retrasado un poco".
De hecho, algunas de las medidas adoptadas para controlar las turbulencias en la bolsa y reactivar la economía han aparecido como "improvisadas".
Weber ve similitudes entre la China actual y la Europa de los años 90 del siglo pasado, cuando por primera vez se vieron privatizaciones en compañías de telecomunicaciones en Alemania, y una avalancha de interés de pequeños inversores por valores bursátiles.
En línea con lo expresado ayer por el Fondo Monetario Internacional, Weber cree que estamos en una fase de corrección y por eso el crecimiento decae; no obstante, no se trata de una "espiral bajista", ni en términos de renta variable ni de economía global.
En cierto modo, se está volviendo a un modelo anterior, en el que es Estados Unidos el motor de la economía mundial, los países más industrializados se portan mejor que los emergentes y éstos ven como se retiran de forma gradual los fondos que no han dejado de fluir en los últimos años.
Por lo que respecta a la caída de los precios del petróleo, que en el caso del barril de Brent, el de referencia en Europa, ha cotizado hoy por debajo de los 28 dólares, niveles no vistos desde noviembre de 2003, Weber no cree que haya tocado aún suelo.
Y es que el levantamiento de las sanciones a Irán ha implicado un inmediato aumento de la oferta.
En Estados Unidos, con la ayuda de la Reserva Federal, el crecimiento será sostenido y se mantendrá el nivel de pleno empleo del que disfruta el país, con una perspectiva de crecimiento del 2,5 %, una buena cifra, si bien, "lejos de las de años pasados".
En Europa, el Banco Central Europeo (BCE) tiene menos margen de maniobra que su homólogo estadounidense, y en opinión de Weber este año "seguirá haciendo lo mismo que hasta ahora: mantener los estímulos y comprar deuda", pero nada más, de momento.
En cualquier caso, las políticas económicas de los bancos centrales pasan por una fase en la que su credibilidad está en entredicho, porque los inversores demandan medidas que den estabilidad pero que no pretendan únicamente mitigar la volatilidad.