Panamá, 16 mar (EFE).- El Gobierno de Colombia espera que el
tratado de libre comercio (TLC) que negocia con Panamá resuelva las
complicaciones que se originan por los productos chinos que llegan a
su mercado procedentes del país centroamericano y su zona franca de
Colón.
"Creo que esas expectativas y de alguna manera esos señalamientos
de algunas complicaciones se van a ir aclarando, en la medida en que
podamos ir avanzando en las negociaciones y en que transmitamos
lógicamente estas normas y estos procedimientos", indicó el jefe del
equipo negociador colombiano, Santiago Pardo Salguero.
Pardo Salguero, que encabeza la delegación de su país en la
primera ronda de negociaciones del TLC con Panamá, que comenzó ayer
en la capital del país centroamericano, reconoció que este asunto,
más que temores, genera señalamientos y expectativas entre los
empresarios colombianos.
Sobre la marcha de las conversaciones, el viceministro panameño
de Comercio, Francisco Álvarez de Soto, dijo que los equipos
negociadores "fundamentalmente se han dedicado a revisar los textos
propuestos por ambas delegaciones, intercambiando posiciones sobre
temas de fondo", que no precisó.
"Evidentemente no podemos reportar el cierre de nada, han estado
avanzando en cuanto a entender bien los textos para que se puedan
definir más adelante posiciones", añadió.
Pese a que los equipos negociadores han evitado de momento el
contacto con a la prensa, De Soto negó que las negociaciones se
iniciaran con hermetismo o secretismo.
"No podemos, por respeto al proceso mismo, estar dando
declaraciones sobre las especificidades de un proceso que exige
mucha responsabilidad y que el manejo sea en las mesas por los
técnicos y los negociadores", sostuvo.
Pardo Salguero señaló que este es un proceso "lógicamente
conducido por Gobiernos, pero de una manera transparente, amplia e
incluyente", y aseguró que ambas partes mantienen informados a sus
sectores privados.
Colombia y Panamá negocian un total de 24 áreas como acceso a
mercado, procedimiento de origen, administración aduanera o medidas
sanitarias y fitosanitarias, entre otras.
Está previsto que tras, esta primera ronda, se produzca una
segunda en Bogotá, del 12 al 16 de abril, y una tercera que se
definirá según los resultados de las dos anteriores.
Las exportaciones de Colombia a Panamá en 2009 sumaron 258,3
millones de dólares, mientras que en sentido inverso apenas
alcanzaron los 15,7 millones de dólares, según datos oficiales.
En diciembre pasado, por sentencia de la Organización Mundial de
Comercio (OMC), Colombia suspendió las restricciones de ingreso que
desde hacía tres años aplicaba a las reexportaciones desde la Zona
Libre de Colón (Panamá), por considerarlas discriminatorias.
Colombia se quejaba del ingreso indiscriminado de mercancía de
contrabando desde el puerto franco panameño, por lo que limitó el
acceso a dos puertos colombianos, con el fin de combatir este
trasiego de mercancías que, según Bogotá, se convertía en una
competencia desleal a su producción nacional por sus bajos precios.
Panamá ganó sucesivamente tres paneles de arbitraje en la OMC al
argumentar que las medidas colombianas iban contra las reglas del
libre comercio, pues son las aduanas colombianas las que deben
evitar el contrabando. EFE