Bangkok, 26 oct (EFE).- La Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) ha expresado su "grave preocupación" por la reciente escalada de violencia en Birmania tras un ataque bomba en la prisión más grande del país y las denuncias sobre un ataque aéreo de la junta militar que causó decenas de civiles muertos.
"Observamos con alarma el último recrudecimiento de los combates", apuntó anoche en un comunicado ASEAN, conformado por Birmania y otros 9 países, al incidir que la violencia actual "empeora la situación humanitaria" y es contraria al pacto alcanzado en abril de 2021 con la junta militar para resolver el conflicto.
A pesar de que el comunicado no cita textualmente al Ejército, que terminó con la incipiente democracia de Birmania mediante un golpe de Estado el 1 de febrero de 2021, ASEAN señala a una de las partes involucradas "con un poder significativo sobre el terreno".
"Hacemos un llamamiento urgente a todas las partes involucradas, en particular a una con un poder significativo sobre el terreno, a tomar medidas concretas para permitir un proceso de diálogo inclusivo y constructivo y buscar una solución pacífica y la reconciliación nacional", apunta el comunicado.
Opositores al régimen militar y medios locales informaron de un ataque aéreo perpetrado el domingo por aviones del Ejército contra un festival organizado por un grupo rebelde del norte del país.
Según estas fuentes, el bombardeo habría causado decenas de muertos y más de un centenar de heridos, muchos de ellos civiles.
En medio de la condena internacional, el portavoz de la junta militar, Zaw Min Tun, confirmó este martes a EFE un ataque contra un bastión del grupo insurgente Ejercito para la Independencia Kachin, en el norte del país, pero calificó de "mentiras" los "rumores" sobre la muerte de civiles.
El comunicado de ASEAN también hace referencia al ataque con un paquete bomba registrado el pasado miércoles en la prisión Insein, en Rangún, la mayor del país y donde se encuentran la mayoría de los presos políticos de Birmania, en el que murieron ocho personas -cinco de ellas civiles- y 18 resultaron heridas.
Si bien la autoría del ataque es incierta, la junta acusa en un comunicado enviado a EFE a un supuesto y desconocido grupo llamado "The Special Task Agency of Burma" (traducido como "Unidad de Asuntos Especiales de Birmania"), al que califica de "terrorista".
"Instamos encarecidamente a la máxima moderación y al cese inmediato de la violencia (...) por el bien de la paz, seguridad y estabilidad en (Birmania y) la región", remarca la ASEAN.
Los mandatarios del bloque del Sudeste Asiático tiene previsto reunirse en Nom Pen entre el 11 y 13 de noviembre para tratar, entre otros asuntos, la preocupante situación del país tras más de 20 meses de la sublevación militar.
Camboya, que alberga este año la presidencia rotatoria de la ASEAN, señaló que el líder de la junta militar, Min Aung Hlaing, no está invitado a la cumbre de líderes.
El golpe de Estado militar que acabó con el Gobierno electo de Aung San Suu Kyi ha desencadenado una feroz represión por parte del Ejército y sumido a Birmania en una profunda crisis política, social y económica.