Bruselas, 26 abr (.).- El Tribunal de Cuentas de la Unión Europea instó este martes a mejorar el marco jurídico de protección de los derechos de propiedad intelectual en la UE tras identificar una serie de deficiencias, en particular en la directiva sobre dibujos y modelos y el mecanismo de tasas.
En un informe dado a conocer hoy, los auditores comunitarios también consideran que es necesario ir hacia una mejor armonización de los sistemas nacionales y de la UE en materia de protección de los derechos de propiedad intelectual, que garantizan que las empresas y los diseñadores puedan beneficiarse de sus creaciones.
De hecho, subrayan que estos derechos son “cruciales” para la competitividad mundial de la UE, y que los sectores intensivos en propiedad intelectual generan casi la mitad de la actividad económica de la UE (el 45 %), por un valor de 6,6 billones de euros, y aportan casi un tercio del empleo total en la Unión (el 29 %).
Así, se calcula que cada año los productos falsificados, además de presentar riesgos para la seguridad, generan unas pérdidas en las ventas de la economía legítima por valor de 83.000 millones de euros.
Si se abordara eficazmente este problema, la economía de la UE sumaría 400.000 puestos de trabajo, según una estimación reciente de la Oficina de Propiedad Intelectual de la UE (EUIPO).
Los auditores señalan que existen medidas legislativas y de apoyo para proteger las marcas de la UE, pero al mismo tiempo alertan de “deficiencias” en la directiva sobre dibujos y modelos de la UE, que “debería surtir el mismo efecto en toda la UE”.
Esa regulación está "incompleta y desfasada” y, como consecuencia de ello, los sistemas nacionales y de la UE “no están armonizados”, se indica en el informe.
Esto permite que se sigan prácticas divergentes entre los Estados miembros durante los procesos de solicitud, examen, publicación y registro; y se genere así inseguridad jurídica.
Los auditores llaman la atención sobre la falta de un régimen de protección para todos los productos a escala de la UE, ya que el marco de indicaciones geográficas de la UE no afecta a los productos no agrícolas, como la artesanía y los diseños industriales, aunque algunos Estados miembros cuentan con legislación para protegerlos.
Precisamente, la CE presentó hace dos semanas una propuesta para crear un sistema de indicaciones geográficas para dar a los productos industriales o artesanales, como el calzado de Elche o los cuchillos de Albacete, una protección en toda la UE como tienen ya algunos productos agroalimentarios.
Por otra parte, los auditores cuestionan el mecanismo de tasas por las importantes disparidades entre las de la UE y las cobradas por las autoridades nacionales, y por que no reflejan los costes reales.
Creen que no existe un método claro para determinar su estructura e importe, lo que da lugar a “un volumen excesivo de tasas que genera superávits acumulados” de más de 300 millones de euros en las cuentas de la EUIPO de 2020, y contraviene el principio de equilibrio presupuestario establecido en el Derecho de la UE.
Finalmente, el Tribunal de Cuentas afirma que las insuficiencias e incoherencias en los controles aduaneros de los Estados miembros también afectan negativamente al respeto de estos derechos y la lucha contra las falsificaciones.
La protección de los derechos de propiedad intelectual en la UE “varía en función del lugar de importación”, por lo que -advierte- existen diferentes prácticas para destruir mercancías falsificadas, lo que puede llevar a los falsificadores a importar sus productos a la Unión en lugares con controles y sanciones “menos estrictos”.
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