Berlín, 26 feb (.).- El consorcio químico alemán BASF (DE:BASFN) registró en 2020 pérdidas por valor de 1.000 millones de euros (1.211 millones de dólares) con lo que cerró un año en números rojos por primera vez en varias décadas, informó este viernes la compañía.
El resultado operativo bajó un 23 % para quedar en 3.600 millones de euros.
La facturación, en cambio, con 59.100 millones de euros, estuvo al mismo nivel que la de la 2019.
"El año pasado fue un gran desafío pero tuvimos una aceleración en la recta final", dijo el presidente Martin Brudermüller, en referencia a la recuperación mostrada durante el cuarto trimestre.
En febrero de 2020, BASF había hecho un pronóstico claramente más positivo del año pero tuvo que corregirlo poco después con el desencadenamiento de la pandemia.
Para 2021, BASF espera mejores resultados y una ganancia operativa de entre 4.100 y 5.000 millones de euros y una facturación de entre 61.000 y 65.000 millones de euros, lo que representaría un aumento del 8 %.
Pese a las pérdidas el consorcio quiere mantener el dividendo en 3,30 euros por acción y pagar a sus empleados bonificaciones por valor de 360 millones de euros.
La caída de la demanda por parte del sector del automóvil y del transporte en los primeros meses de la pandemia fue un factor que afectó los negocios de BASF.