31 oct (Reuters) - El abaratamiento del petróleo lastró el beneficio ajustado de Repsol (MC:REP) en el tercer trimestre, si bien la petrolera española logró superar las expectativas del mercado gracias a la resistencia de sus negocios de refino.
Repsol bombeó más petróleo entre julio y septiembre, pero los precios del crudo sufrieron presión bajista por la mayor oferta en Estados Unidos y por la perspectiva de que la desaceleración económica global y las disputas comerciales termine afectando a la demanda.
El grupo de petróleo y gas obtuvo un beneficio neto ajustado de 522 millones de euros en el tercer trimestre, un 11,2% menos que en el mismo periodo del año anterior. Los analistas de una muestra realizada por la propia compañía esperaban de media un resultado de 479 millones de euros.
La filial de "downstream", que incluye los negocios de refino, marketing y GLP, registró un incremento del 10,7% en su beneficio neto ajustado trimestral (antes de extraordinarios y a coste constante de inventario).
El margen de refino en España subió a 5,5 dólares por barril en el periodo, desde los 3,5 dólares del trimestre anterior, según avanzó Repsol a principios de octubre.
En los primeros nueve meses del año, el beneficio ajustado de Repsol bajó un 4,8% a 1.637 millones de euros, caída que la petrolera atribuyó a la ausencia de plusvalías (el año pasado vendió su participación histórica en Naturgy, la antigua Gas Natural (MC:NTGY)) y la menor valoración de sus inventarios de hidrocarburos por la caída del crudo.
Estos factores "tuvieron un efecto comparativo negativo de más de 600 millones de euros respecto al año anterior", dijo la petrolera en uno de sus comunicados al supervisor bursátil.
Repsol cerró septiembre con una deuda neta de 3.840 millones de euros, un incremento de 174 millones respecto a junio, por el coste del programa para recomprar y posteriormente amortizar acciones por el 5% de su capital, una de las formas con las que la petrolera retribuye tradicionalmente a sus accionistas.
La compañía dirigida por Josu Jon Imaz se está diversificando hacia negocios menos contaminantes como el de electricidad, apostando por proyectos eólicos y solares.
![](https://i-invdn-com.akamaized.net/trkd-images/LYNXMPEF9U0M4_L.jpg)
Un análisis detallado de 50 compañías de petróleo y gas realizado por Transition Pathway Initiative en septiembre concluyó que sólo Repsol y el gigante británico-holandés Royal Dutch Shell (LON:RDSb) estaban alineadas con los objetivos nacionales de emisiones de CO2 pactados en el Acuerdo de París de 2015.
(Información de Laura Hijón; editado por Jose Elías Rodfríguez y Tomás Cobos)