Por Eric M. Johnson y Tim Hepher
SEATTLE/PARIS, 6 oct (Reuters) - Boeing (NYSE:BA) redujo el martes su pronóstico para la demanda de aviones en los próximos 20 años, en un momento en que la agitación económica por la pandemia de COVID-19 está golpeando con fuerza las entregas.
Boeing, que domina las ventas de aviones junto con la europea Airbus (PA:AIR), pronosticó entregas de 43.110 aviones comerciales durante los próximos 20 años, un 2% menos que los 44.040 proyectados hace un año y con un valor sin cambios de 6,8 billones de dólares a precios de catálogo.
Esta es la primera vez que Boeing recorta la previsión de demanda a 20 años en términos de número de entregas desde la crisis financiera de 2009.
Boeing también entregó por primera vez un desglose parcial de la primera mitad del período de 20 años, mostrando fuertes caídas en la próxima década tras la crisis del COVID-19. Predijo 18.350 entregas entre 2020 y 2029, un 10,7% menos que un pronóstico no publicado de 20.550 incluido en el último informe.
"La industria claramente ha sido impactada de forma dramática (...) por la pandemia", dijo el vicepresidente de marketing comercial de Boeing, Darren Hulst.
Un pronóstico clave del crecimiento del tráfico de pasajeros ha estado bajando desde 2015, cuando alcanzó su punto máximo en medio de un auge a niveles récord de la industria de la aviación. Pero tuvo un fuerte impacto en el último informe, al caer de un 4,6% a 4% con respecto al año pasado.
Aun así, Boeing expresó su confianza en que la demanda volverá al ritmo anterior en la década de 2030, haciendo eco del repunte observado tras crisis previas. Los ambientalistas dicen que lo que está sucediendo es una oportunidad para que la industria se reduzca.
"Pasará más tiempo con esta crisis, pero (...) el sector volverá a demostrar resistencia; los fundamentos no están cambiando", sostuvo Hulst.
La empresa dijo que la demanda se verá impulsada en parte por un aumento en la cantidad de reemplazos en las flotas a medida que las aerolíneas aceleren el retiro de aviones más antiguos para ahorrar costos de funcionamiento y cumplir con metas ambientales.
(Información de Eric M. Johnson en Seattle; editado en español por Rodrigo Charme)