Sao Paulo, 20 ago (EFE).- La bolsa de Sao Paulo cayó hoy un 2,07 %, con su índice Ibovespa en los 50.507 puntos, en una clara jornada de ajuste en la que los inversores quisieron embolsar las ganancias acumuladas tras nueve días consecutivos de apreciación en el parqué.
Luego de que el Ibovespa acumulara este mes una subida del 6,9 % hasta el lunes, los inversores, también presionado por el pesimismo en los mercados internacionales, dieron órdenes de venta para poder embolsar las ganancias que obtuvieron al comprar en los últimos días papeles que estaban a bajos precios.
El ajuste se reflejó principalmente en las acciones de las empresas productoras y exportadoras de materias primas, que habían alcanzado fuertes apreciaciones en los últimos días con la expectativa de que Brasil elevará sus exportaciones gracias a la devaluación del real y a la mejoría económica en importantes clientes como China y Estados Unidos.
Ese ajuste afectó las acciones de la minera Vale, la mayor productora y exportadora mundial de hierro, cuya depreciación terminó hundiendo el índice Ibovespa en general, ya que los papeles preferenciales de esta empresa son los más negociados en el parqué paulista.
Las acciones preferenciales de la Vale, los que más cambiaron de manos en la jornada con el 10,71 % de los negocios, cayeron un 2,81 %, en tanto que las ordinarias de la misma compañía bajaron un 2,83 %.
El ajuste también afectó a la petrolera Petrobras, otra de las empresas que se había beneficiado con la serie de nueve jornadas de ganancias y cuyos papeles preferenciales, los segundos más negociados (7,85 % del total), se depreciaron un 3,93 %.
Las acciones del Ibovespa que más perdieron valor este martes fueron las ordinarias de la red de ventas por internet B2W Digital, con una caída del 8,44 %, seguidas por las preferenciales de la siderúrgica Usiminas (-6,48 %) y por las ordinarios de Usiminas (-5,95 %).
Igualmente sufrieron fuertes bajadas los papeles ordinarios de las constructoras Gafisa (-5,59 %) y Rossi Residencial (-5,25 %).
Las acciones de las empresas siderúrgicas, que la víspera habían registrado importantes subidas, volvieron a bajar luego de que la patronal del sector admitiera que Brasil no aumentará ni la producción ni las exportaciones de acero este año.
Entre los títulos del Ibovespa que cerraron con las mayores ganancias destacaron los ordinarios del productor de carnes JBS (+1,97 %), los preferenciales de la aerolínea Gol (+1,79 %) y los ordinarios de Cetip (+1,36 %).
El volumen financiero negociado en la plaza brasileña superó los 7.022,6 millones de reales (unos 2.930,9 millones de dólares) en 1.009.598 operaciones.
En el mercado de divisas, el real brasileño se apreció hoy un 0,91 % frente al dólar, que cerró negociado a 2,392 reales para la compra y 2,394 para la venta en el tipo de cambio comercial, tras seis subidas consecutivas y de haber alcanzado la víspera su mayor valor desde marzo de 2009.
El real finalmente paró de caer en Brasil gracias a las millonarias ventas de dólares hechas en el mercado por el Banco Central (cerca de 6.000 millones de dólares tan sólo este martes) para evitar una mayor oscilación y a la propia depreciación de la moneda estadounidense en otros países. EFE
Luego de que el Ibovespa acumulara este mes una subida del 6,9 % hasta el lunes, los inversores, también presionado por el pesimismo en los mercados internacionales, dieron órdenes de venta para poder embolsar las ganancias que obtuvieron al comprar en los últimos días papeles que estaban a bajos precios.
El ajuste se reflejó principalmente en las acciones de las empresas productoras y exportadoras de materias primas, que habían alcanzado fuertes apreciaciones en los últimos días con la expectativa de que Brasil elevará sus exportaciones gracias a la devaluación del real y a la mejoría económica en importantes clientes como China y Estados Unidos.
Ese ajuste afectó las acciones de la minera Vale, la mayor productora y exportadora mundial de hierro, cuya depreciación terminó hundiendo el índice Ibovespa en general, ya que los papeles preferenciales de esta empresa son los más negociados en el parqué paulista.
Las acciones preferenciales de la Vale, los que más cambiaron de manos en la jornada con el 10,71 % de los negocios, cayeron un 2,81 %, en tanto que las ordinarias de la misma compañía bajaron un 2,83 %.
El ajuste también afectó a la petrolera Petrobras, otra de las empresas que se había beneficiado con la serie de nueve jornadas de ganancias y cuyos papeles preferenciales, los segundos más negociados (7,85 % del total), se depreciaron un 3,93 %.
Las acciones del Ibovespa que más perdieron valor este martes fueron las ordinarias de la red de ventas por internet B2W Digital, con una caída del 8,44 %, seguidas por las preferenciales de la siderúrgica Usiminas (-6,48 %) y por las ordinarios de Usiminas (-5,95 %).
Igualmente sufrieron fuertes bajadas los papeles ordinarios de las constructoras Gafisa (-5,59 %) y Rossi Residencial (-5,25 %).
Las acciones de las empresas siderúrgicas, que la víspera habían registrado importantes subidas, volvieron a bajar luego de que la patronal del sector admitiera que Brasil no aumentará ni la producción ni las exportaciones de acero este año.
Entre los títulos del Ibovespa que cerraron con las mayores ganancias destacaron los ordinarios del productor de carnes JBS (+1,97 %), los preferenciales de la aerolínea Gol (+1,79 %) y los ordinarios de Cetip (+1,36 %).
El volumen financiero negociado en la plaza brasileña superó los 7.022,6 millones de reales (unos 2.930,9 millones de dólares) en 1.009.598 operaciones.
En el mercado de divisas, el real brasileño se apreció hoy un 0,91 % frente al dólar, que cerró negociado a 2,392 reales para la compra y 2,394 para la venta en el tipo de cambio comercial, tras seis subidas consecutivas y de haber alcanzado la víspera su mayor valor desde marzo de 2009.
El real finalmente paró de caer en Brasil gracias a las millonarias ventas de dólares hechas en el mercado por el Banco Central (cerca de 6.000 millones de dólares tan sólo este martes) para evitar una mayor oscilación y a la propia depreciación de la moneda estadounidense en otros países. EFE