Brasilia, 9 oct (EFE).- El Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central (BC) de Brasil aumentó hoy en medio punto porcentual la tasa básica de intereses Selic, que pasó del 9 % al 9,5 % porcentual, en una decisión unánime que era esperada por el mercado.
El encarecimiento del crédito fue anunciado por el emisor tras una nueva reunión periódica de los miembros del Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central, que justificó la decisión por sus temores con la inflación.
La autoridad monetaria señaló en un comunicado que el Copom "evaluó que esa decisión contribuirá para colocar la inflación en declive y asegurar que esa tendencia persista en el próximo año".
En abril, el ente emisor comenzó el ciclo de alzas de la tasa básica de intereses con una subida de un cuarto de punto porcentual, después de casi dos años sin subir y tras haber llegado en octubre de 2012 al mínimo histórico del 7,25 %.
Durante el Gobierno de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, quien asumió en 2011, el ente emisor llevó a cabo diez reducciones seguidas.
La subida de los tipos supone un encarecimiento del crédito, por lo que puede frenar el consumo interno, el principal motor de la economía de Brasil, y dificultar su recuperación tras dos años de desaceleración económica, según analistas del mercado.
Según la Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo (FIESP), el mayor gremio empresarial del país, el Banco Central continúa "errando" al aumentar la tasa de intereses, "después de que la inflación se sitúe dentro del intervalo de meta y el crecimiento del PIB apunte un resultado negativo en este tercer trimestre".
La meta de inflación del Gobierno para 2013 es del 4,5 %, con un margen de tolerancia de dos puntos porcentual, lo que permite que el actual acumulado en los últimos doce meses del 5,86 % esté dentro de las previsiones oficiales.
"Este nuevo aumento de la tasa de intereses viene a perjudicar el momento propicio para la retomada de la actividad. El estímulo a la producción nacional dado por la desvalorización del cambio será anulado por el aumento de la tasa de intereses", afirmó el presidente de la FIESP, Paulo Skaf.
La próxima reunión del Copom está programada para dentro de cuarenta días. EFE
El encarecimiento del crédito fue anunciado por el emisor tras una nueva reunión periódica de los miembros del Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central, que justificó la decisión por sus temores con la inflación.
La autoridad monetaria señaló en un comunicado que el Copom "evaluó que esa decisión contribuirá para colocar la inflación en declive y asegurar que esa tendencia persista en el próximo año".
En abril, el ente emisor comenzó el ciclo de alzas de la tasa básica de intereses con una subida de un cuarto de punto porcentual, después de casi dos años sin subir y tras haber llegado en octubre de 2012 al mínimo histórico del 7,25 %.
Durante el Gobierno de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, quien asumió en 2011, el ente emisor llevó a cabo diez reducciones seguidas.
La subida de los tipos supone un encarecimiento del crédito, por lo que puede frenar el consumo interno, el principal motor de la economía de Brasil, y dificultar su recuperación tras dos años de desaceleración económica, según analistas del mercado.
Según la Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo (FIESP), el mayor gremio empresarial del país, el Banco Central continúa "errando" al aumentar la tasa de intereses, "después de que la inflación se sitúe dentro del intervalo de meta y el crecimiento del PIB apunte un resultado negativo en este tercer trimestre".
La meta de inflación del Gobierno para 2013 es del 4,5 %, con un margen de tolerancia de dos puntos porcentual, lo que permite que el actual acumulado en los últimos doce meses del 5,86 % esté dentro de las previsiones oficiales.
"Este nuevo aumento de la tasa de intereses viene a perjudicar el momento propicio para la retomada de la actividad. El estímulo a la producción nacional dado por la desvalorización del cambio será anulado por el aumento de la tasa de intereses", afirmó el presidente de la FIESP, Paulo Skaf.
La próxima reunión del Copom está programada para dentro de cuarenta días. EFE