Sao Paulo, 10 jul (EFE).- Brasil necesita 21.000 kilómetros de autopistas para aumentar su integración nacional y mejorar la movilidad terrestre en el país, según reveló un estudio divulgado hoy por la consultora de negocios Bain & Company.
La inversión necesaria será de entre 200.000 millones y 250.000 millones de dólares, afirmó hoy a Efe Fernando Martins, socio de la consultora y uno de los autores del estudio.
De acuerdo con los datos divulgados en el documento, el programa podría ser ejecutado en un período de seis a ocho anos, sin considerar los posibles atrasos por licencias y compra de terrenos.
El impacto en el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) brasileño, destacó el estudio, sería del 1,25 % anual.
El estudio se centró principalmente en las autopistas, concepto aplicado en el informe para las vías dobles de dos carriles o más en cada sentido.
La investigación analizó índices de amplitud y cobertura de la red vial, condiciones de seguridad y costo de transporte, mantenimiento y nivel de inversiones anuales.
Según Martins, la realización de la investigación fue motivada por los trabajos de logística de la propia consultora y las constantes reclamaciones de sus clientes con relación a los costos de transporte y dificultades para cumplir horarios de entrega.
El informe sugiere la ampliación de las carreteras existentes en el país, como una forma "más fácil" para cumplir la meta de 21.000 kilómetros más de autopistas en el país.
El costo referido en el estudio, agregó Martins, "incluye también el mejoramiento de las vías, con túneles y viaductos, y no sólo de duplicarlas (en número de carriles)".
Otro motivo para acelerar la inversión en autopistas sería el alto costo del transporte y su importancia para la competitividad de la industria brasileña.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) señaló que en 2008 América Latina gastaba el 7 % del valor de las exportaciones con costos de transporte, casi el doble del 3,7 % pagado en Estados Unidos.
Parte del alto costo, indicó Martins, se debe a que la matriz brasileña de integración es "excesivamente dependiente" de carreteras, con un equivalente al 60 %, mientras que en Estados Unidos sólo el 26 % de las mercancías es transportada por vía terrestre.
La alternativa propuesta por el estudio sería una inversión adicional en ferrocarriles y corredores fluviales, sistemas considerados por el estudio como "más baratos y ventajosos", pero sin que su impulso impida el mejoramiento de la red vial terrestre.
En Brasil, durante el Gobierno de Juscelino Kubitschek, en la década del cincuenta, se amplió el sistema vial, en respuesta de la instalación de la industria automotriz.
Estados Unidos cuenta con una red ferroviaria de 200.000 kilómetros, diez veces mayor que la existente en Brasil.
El estudio actual sobre el sistema vial será entregado a las secretarías de transporte y los órganos responsables del Gobierno federal. EFE