París, 3 nov (.).- La Comisión Europea (CE) participará el próximo viernes en una nueva reunión de negociación en el conflicto sobre las licencias de pesca entre Francia y el Reino Unido, en lo que parece una victoria de París para salir del marco puramente bilateral de las discusiones.
El portavoz del Gobierno francés, Gabriel Attal, anunció hoy esa nueva reunión, que está programada un día después del encuentro en París entre el ministro británico para Asuntos Europeos, David Frost, y su homólogo francés, Clément Beaune.
En una conferencia de prensa al término del Consejo de Ministros, Attal hizo hincapié en que el contencioso "es una cuestión europea" y por eso consideró "muy importante" la presencia del Ejecutivo comunitario en la convocatoria del viernes.
Horas antes, el secretario de Estado francés de Transportes, Jean-Baptiste Djebbari, había justificado que hasta ahora la negociación se haya llevado a cabo en un marco bilateral porque los franceses son "los más afectados" por el rechazo de Londres a conceder licencias a algunos pesqueros europeos para faenar en sus aguas jurisdiccionales.
Attal quiso dejar claro que las medidas de represalia contra el Reino Unido que había anunciado la semana pasada están "suspendidas" pero siguen "encima de la mesa" y Francia está dispuesta a implementarlas "si no conseguimos un acuerdo".
Las represalias consisten básicamente en prohibir que los pesqueros británicos desembarquen su cargamento en puertos franceses y endurecer los controles de las importaciones de pescado británico e inicialmente debían haber entrado en vigor el 2 de noviembre.
Sin embargo, el presidente francés, Emmanuel Macron, quiso dar un margen suplementario a la negociación después de entrevistarse el lunes en Glasgow con el primer ministro británico, Boris Johnson.
Ahora el Gobierno francés va a esperar al resultado de los encuentros de mañana y del viernes para decidir.
Según su portavoz, "lo que esperamos es que el Reino Unido respete el acuerdo del Brexit" que firmó después de una larga negociación, y eso incluye las licencias de pesca.
Después de que Londres y las islas anglo-normandas hayan concedido licencias durante las últimas semanas, faltan por aprobar varias decenas de permisos, según el Gobierno francés.
Una situación muy diferente de la de otros países de la UE, que sí han conseguido que Londres dé el visto bueno a la práctica totalidad de sus solicitudes.