Bruselas, 25 abr (.).- La Comisión Europea (CE) presentó hoy un paquete de medidas para establecer reglas comunes en los Veintiocho sobre fusiones, escisiones y cambios de sedes sociales de compañías, un derecho reconocido por la libertad de establecimiento que no está regulado de igual forma en toda la Unión Europea (UE).
Bajo las nuevas normas, todos los Estados miembros compartirán la misma legislación, que incluye también una serie de salvaguardas para evitar un abuso de la posibilidad de cambiar de sede social para, por ejemplo, no pagar impuestos en el país donde la compañía opera en realidad.
"Si esto sucediera, la operación será detenida por el Estado miembro del que la compañía se va antes de que el cambio pueda tener lugar", señala la Comisión en un comunicado.
Bruselas asegura que algunos países imponen "obstáculos administrativos excesivos" a las empresas que quieren realizar este tipo de operaciones, lo cual "desincentiva que las compañías persigan nuevas oportunidades".
La legislación propuesta permitirá que una compañía pueda cambiar de sede social desde un Estado miembro a otro sin tener que ser liquidada en primer lugar, algo que hasta ahora no era posible al mover empresas desde países como Alemania.
Según Bruselas, esto asegurará "una continuidad legal" y preservará gestiones contractuales con acreedores.
Según datos de la Comisión, los cambios permitirán ahorrar entre 12.000 y 19.000 euros por operación y un total de entre 176 y 280 millones de euros en un plazo de cinco años.
Fuentes comunitarias confiaron en que "el terreno está bien preparado" para que la propuesta logre el apoyo del Parlamento Europeo y el Consejo, y señalaron la posibilidad de que haya un "interés" de compañías del Reino Unido para cambiar su sede social a otro Estado miembro antes del "brexit".
"Creemos que tenemos la oportunidad de intentar finalizar esta normativa durante esta legislatura", señalaron las fuentes, a lo que agregaron que "podría haber un escenario" en el que las compañías en el Reino Unido puedan beneficiarse de las nuevas normas antes de que el "brexit" se haga efectivo.
La propuesta también incluye nuevas normas para simplificar el procedimiento de crear compañías a través de internet, una posibilidad que ahora solo existe en 17 Estados miembros.
Una vez aprobadas las reglas, el proceso para registrarse, crear nuevas sucursales y aportar documentos pertinentes podrá realizarse completamente en línea.
Según cifras de la Comisión, el registro en línea reducirá a la mitad el tiempo que una persona tarda en registrar una nueva compañía y hará el proceso tres veces más barato, lo que supondrá un ahorro de entre 42 y 84 millones de euros para las compañías europeas.
Para prevenir el fraude y en casos de que haya dudas razonables sobre la identidad de la persona que está intentando registrar una empresa, las autoridades nacionales podrán rechazar que el proceso entero se haga a través de internet y requerir la presencia física de los interesados.
(Más información sobre la Unión Europea en euroefe.euractiv.es)