Bruselas, 16 mar (.).- La aerolínea belga Brussels Airlines, recientemente adquirida por la alemana Lufthansa (DE:LHAG), anunció hoy que cerró 2016 con un beneficio neto de 15 millones de euros pese al atentado que sufrió el aeropuerto de Bruselas hace un año y a "la fuerte competencia de compañías de bajo coste".
A pesar de esas circunstancias, la compañía indicó en un comunicado que repartirá con el personal 2,5 millones de euros "en reconocimiento de los enormes esfuerzos realizados después de los ataques".
Brussels Airlines indicó asimismo que su beneficio operativo en 2016 fue de 20,4 millones de euros, y que "pese a un año difícil" sus pasajeros crecieron un 3,2 % hasta 7,7 millones.
La empresa recordó también que el impacto financiero directo de los atentados en Bruselas del 22 de marzo de 2016 supuso 100 millones de euros, se los que "sólo una parte" pudo compensarse a través de las aseguradoras.
Frente a los ataques, además, la compañía continuó con sus inversiones previstas y expandió su red intercontinental a Toronto (Canadá) y anunció una nueva ruta a Bombay (la India) para este mes.
La oferta de asientos europeos creció un 3 % y la empresa ratificó el programa de renovación de la flota (en octubre su último AVRO RJ100 abandonará la flota).
Lufthansa, que ya poseía desde 2008 el 45 % de las acciones de la compañía, adquirió el año pasado el 55 % restante de Brussels Airlines para hacerse con el control total de la sociedad, operación por la que pagó a SN Airholding 2,6 millones de euros pese a que el valor de ese paquete accionarial era de 150 millones de euros.
Esa diferencia se debía a que Lufthansa usó una cláusula que permitía rebajar el precio de recompra si Brussels Airlines tenía una deuda con ella.