Barcelona, 7 jun (.).- CaixaBank (MC:CABK) ha abierto hoy la puerta a reducir el número de extinciones en la red comercial y a estudiar fórmulas para la redistribución territorial del excedente de personal que ha planteado tras su fusión con Bankia (MC:BKIA) y que ha cuantificado en unas 8.000 bajas, entre despidos y recolocaciones.
Empresa y sindicatos mantienen este lunes una nueva reunión para negociar el ajuste de plantilla, en la que la dirección ha puesto sobre la mesa algunas nuevas propuestas.
La dirección ha mostrado su disposición a estudiar fórmulas que permitan redistribuir territorialmente el excedente de personal, con el fin de poder aceptar el máximo de peticiones de adhesión voluntaria en aquellas zonas donde el número de interesados en solicitar el plan de salidas incentivadas sea superior al cupo previsto.
CaixaBank, además, estudiará la posibilidad de reducir el número de extinciones en la red comercial, de forma que ese exceso de plantilla facilite cubrir necesidades como, por ejemplo, bajas de larga duración, vacaciones o bajas de maternidad o paternidad, han explicado fuentes de la entidad.
Respecto a las compensaciones por la extinción de contratos, el banco ha pedido a los sindicatos que planteen una propuesta "asumible" y "conforme a la realidad del negocio bancario".
La última propuesta del ERE de CaixaBank contempla 7.605 extinciones de contratos y 686 recolocaciones, así como prejubilaciones a partir de los 56 años.
El banco, además, mantiene el límite máximo de empleados mayores de 52 años que pueden adscribirse al plan de extinciones de contrato, que sigue fijado en el 60 %, alegando que es necesario para preservar el equilibrio generacional y evitar que todas las salidas se concentren en el mismo tramo de edad.
Los sindicatos exigen al banco que garantice la voluntariedad de las adhesiones, que reduzca el número de extinciones, que mejore las indemnizaciones y que retire este cupo de bajas de mayores de 52 años.
Según han explicado los sindicatos, la empresa ha cuantificado en 4.000 millones de euros el coste que tendría la aplicación de las medidas de la representación laboral, lo que considera excesivo.
La representación sindical ha pedido un receso a la dirección para dar una respuesta a su última propuesta.
La reunión negociadora ha coincidido con una nueva jornada de protestas en CaixaBank por el ERE. Los empleados han realizado un paro parcial de 11.00 a 12.00 horas que, según los sindicatos, ha secundado casi el 87 % de la plantilla.