Por Jesús Aguado
BARCELONA (Reuters) - Caixabank (MC:CABK) registró en el cuarto trimestre de 2015 unas pérdidas de 182 millones de euros por el impacto de las saneamientos en su participada Repsol (MC:REP) y otros cargos extraordinarios, en una cuenta que mostró un deterioro del margen de intereses en comparativa intertrimestral.
Repsol -cuya participación del 12,14 por ciento en Caixabank contabiliza por puesta equivalencia- había reconocido el miércoles un deterioro contable en su balance que le provocará pérdidas netas de unos 1.200 millones en 2015 tras realizar saneamientos de 2.900 millones de euros para compensar las fuertes caídas del crudo.
Caixabank explicó que el impacto neto de la participación en Repsol en su cuenta de resultados ascendió a 142 millones en 2015.
En el cuarto trimestre, el resultado de las entidades valoradas por el método de la participación, entre las que se incluye Repsol, arrojó unas pérdidas de 127 millones de euros.
El presidente de Caixabank, Isidro Fainé, como su consejero delegado, Gonzalo Gortázar, aprovecharon la rueda de prensa para mostrar su apoyo al actual equipo directivo de Repsol y consideraron acertadas las recientes medidas tomadas por la petrolera para afrontar el descenso del petróleo.
Gortázar señaló además que no descartaba volver a subir su participación en la petrolera desde el entorno al diez por ciento actual tras la reducción de ayer por la amortización de una emisión de bonos ligados a parte de su participación en la petrolera.
En el conjunto de 2015 el impacto de Repsol se suavizó y los resultados del banco muestran un incremento del beneficio del 31,4 por ciento hasta 814 millones de euros, impulsado por la incorporación del negocio minorista de Barclays (L:BARC) en España.
MÁRGENES MÁS COMPROMETIDOS
En cuanto a la principal actividad del negocio bancario, el margen de intereses -- diferencia entre lo que un banco cobra por prestar y sus costes de financiación -- se incrementó un 4,8 por ciento a 4.353 millones.
No obstante, en comparativa intertrimestral estanco, entre el cuarto y el tercer trimestre, el aumento fue de sólo un 0,7 por ciento al desaparecer aquí el efecto favorable de la incorporación de Barclays.
Al contrario que en el caso de Banco Sabadell (MC:SABE), el margen de interés se vio más penalizado en Caixabank después de que la entidad decidiera eliminar en el trimestre pasado las cláusulas suelo de sus hipotecas a particulares.
De hecho, el grupo dijo en una presentación que para 2016 espera un descenso del margen de intereses de entre el 4 y el 6 por ciento, en un contexto de depreciación del euribor y menor contribución de su cartera de inversión en renta fija.
Respecto a los niveles de solvencia, la entidad finalizó el ejercicio con un ratio de core capital Tier-1 fully loaded del 11,6 por ciento, idéntico nivel al de diciembre.
En diciembre pasado, Caixabank hizo de hecho una permuta por el cual vendió sus participaciones en Bank of East Asia (OTC:BKEAY) e Inbursa (MX:GFINBURO) a Criteria para reducir su consumo de capital y reforzar su balance.
Preguntado Fainé si no tendría sentido que la participación de Repsol también se englobara en Criteria, el directivo reconoció que esta era una posibilidad que se podría estudiar en un futuro.
"No encaja en la actividad bancaria y el día que lo queramos hacer, está previsto pues que tenga que estar en su sitio, que es en Criteria, pero las cosas se hacen en cada momento cuando podemos", dijo Fainé.
Respecto a posibles operaciones de concentración, Fainé negó que estuviera analizando o negociando operaciones de compra en el sector financiero español tras ser preguntado por el eventual interés de Caixabank en Banco Popular (MC:POP) e Ibercaja.
Caixabank subía el viernes un 4,5 por ciento en bolsa, en un contexto de rebote de todo el sector bancario apoyado por los buenos resultados de Sabadell y la especulación sobre posibles fusiones en Italia.
(Información adicional de Tomás Cobos, editado por Robert Hetz y Emma Pinedo)