Barcelona, 1 jul (.).- La dirección y los sindicatos de CaixaBank (MC:CABK) continúan negociando para intentar pactar el ERE que plantea el banco y se han emplazado a retomar los contactos este mediodía, después de que las conversaciones se suspendieran de madrugada ante la falta de acuerdo.
En los dos últimos días, en unas jornadas de negociaciones maratonianas, las dos partes han acercado posiciones y estarían de acuerdo en que el número de salidas sea de 6.452, 1.839 menos que las previstas inicialmente, y que todas sean voluntarias.
Sin embargo, aún no se han podido cerrar todos los flecos del acuerdo, más de 24 horas después de que finalizara el martes el periodo legal de consultas.
La previsión social y las movilidades planteadas por CaixaBank son algunos de los principales escollos para el pacto, según han informado fuentes sindicales, que han pedido a la empresa un último esfuerzo para aceptar sus planteamientos.
La última propuesta de CaixaBank a los sindicatos rebajaba las extinciones de contrato a 6.452 y retiraba los ceses forzosos, una condición exigida por los sindicatos.
La reducción se debe en buena parte a la posibilidad de recolocar empleados en empresas filiales del Grupo CaixaBank, cifra que se eleva a unas 708 personas.
Los sindicatos se han mantenido firmes en rechazar la posibilidad apuntada por la empresa de trasladar a algunos empleados a una distancia superior a 100 kilómetros de su actual puesto de trabajo, y la empresa habría aceptado modificarlo y situar la distancia a un máximo de 75 kilómetros, según han anunciado los representantes sindicales por Twitter.