Lugo, 25 nov (EFE).- La Confederación Intersindical Galega (CIG) ha criticado este viernes que el comité haya aceptado renegociar las condiciones del acuerdo de inversiones con Alcoa (NYSE:AA) en la planta de aluminio primario de San Cibrao (Cervo, Lugo) en ausencia del Gobierno gallego y el central, lo que es “una temeridad”.
“La mayoría del comité considera que basta con remitirles los nuevos términos, una vez que finalice la negociación”, precisa el sindicato nacionalista, que considera “que aceptar estas condiciones” es “una temeridad que les pone en bandeja a las administraciones desentenderse del resultado final de un acuerdo que no se les permite negociar”.
En la misma línea, la CIG recuerda que “defendió en pleno un marco transparente en el que se confeccionen actas y que cuente con la presencia imprescindible del Ministerio y de la Consellería de Industria, así como de las federaciones sindicales. Actores de la negociación que tienen el doble papel de avalar los términos y facilitar las condiciones del acuerdo”.
Esa propuesta, añade, “fue rechazada por el resto de grupos del comité, que no tuvieron problema en aceptar la que hizo la empresa”.
La dirección de Alcoa ha citado a los representantes del comité de empresa del complejo industrial de San Cibrao a una nueva reunión, que se celebrará en León el próximo 30 de noviembre, para establecer una negociación de cara a implantar un nuevo calendario en lo relativo a las inversiones para modernizar la planta.
Dicha reunión ha sido convocada por la multinacional habida cuenta de que la desviación presupuestaria retrasará proyectos como la instalación de un horno de ánodos de gran tamaño, que era una de las condiciones pactadas con el comité de empresa a cambio de apagar las cubas en la fábrica de aluminio primario de San Cibrao.
Según la información trasladada por la propia multinacional en un comunicado, “se han disparado los costes de todos los proyectos, muy particularmente el proyecto para la producción de horno de ánodos grandes, que, de 42 millones de dólares inicialmente presupuestados, supondría ahora en torno a 109 millones”.
También se ha visto incrementado, precisa, el presupuesto para la instalación de las barras de compensación magnética “que pasaría de 12 millones de dólares a 18”.
“La inversión total en la planta, contando todos estos proyectos, supondría un total de 156 millones de euros frente a los 68 millones comprometidos, suponiendo un coste extra de unos 88 millones de dólares”, añade.
Ante esa situación, Alcoa analizó “posibles alternativas” y ha informado a los representantes de los trabajadores de que “les presentará una propuesta en la próxima reunión”, además de abrirse a “escuchar sus propuestas alternativas para llegar a una solución acordada que permita, con el compromiso de todas las partes, avanzar para la viabilidad de la planta de aluminio primario”.
“La intención de este comité de empresa es escuchar las propuestas de la empresa, que valoraremos. Una vez realizada dicha reunión se informará a los trabajadores del resultado de la misma”, informó este viernes la representación de los trabajadores en un escueto comunicado.
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