Sao Paulo, 30 jul (EFE).- Los principales protagonistas del mercado de tecnología defendieron hoy en Sao Paulo la importancia de "ciudades inteligentes sostenibles", en un encuentro promovido por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT).
El organismo especializado de las Naciones Unidas para las tecnologías de la información y la comunicación, en una serie de conferenciantes, resaltó la importancia de la tecnología para mejorar el nivel de vida de las personas.
En Brasil, por ejemplo, el 80 % de la población brasileña vive en la zona urbana según dados divulgados recientemente por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), y su condición frente a la tecnología debe mejorar.
"Nuestra responsabilidad crece a la medida que la tecnología y telecomunicaciones están cada vez más presentes en la vida de las personas", afirmó Paulo César Teixeira, director general de Telefónica Vivo, la filial brasileña de la multinacional española.
El ejecutivo indicó que el papel de la tecnología por su potencial de llevar más seguridad para la población.
Según el gerente regional para América Latina de la UIT, Bruno Ramos, el concepto de "ciudades sostenibles" está "íntimamente relacionado con la capacidad de las tecnologías de mejorar de vida de las personas".
Ramos reveló que a pesar de la mejora de un 47 % en el Índice de Desarrollo Humano municipal en los últimos 20 años en Brasil, la puntuación en el área de educación sigue abajo de lo considerado aceptable por la ONU.
"Fue el índice con mayor crecimiento, con una mejora de un 127 %, pero sigue siendo el más bajo de todos", explicó Ramos, que también defendió que el mejoramiento de la educación "supone el desarrollo de otras áreas".
La participación del Gobierno también fue destacada en el evento, en el cual estuvieron presentes representantes de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel), entidad reguladora del sector en Brasil.
Everaldo Gomes Ferreira, gerente de Anatel, declaró que los agentes reguladores deberían ser "mucho más creadores de parámetros y no reguladores del desarrollo", teniendo en cuenta la velocidad de las innovaciones tecnológicas. EFE