Madrid, 3 oct (.).- El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, ha abogado por la "armonización fiscal" de productos y servicios financieros y de la tributación del ahorro en Europa, y ha advertido de los riesgos regulatorios del "brexit" y del necesario fomento de la financiación empresarial a través de los mercados.
Albella, en un acto de la Asociación de los Mercados Financieros Europeos (AFME, por sus siglas en inglés) celebrado en París, ha hecho estos comentarios este jueves por la "impresionante" influencia de la normativa fiscal "en la estructura del mercado" de los países europeos y en la venta de los productos de inversión.
Como ejemplo, puso el mercado francés, donde hay "enormes" diferencias respecto al español "en cuanto al tratamiento fiscal de las inversiones en pymes o del capital riesgo, capital privado o inversiones alternativas".
Se ha referido también en su intervención a las dificultades para establecer "mínimamente" una normativa fiscal unitaria para el producto paneuropeo de pensiones individuales (PEPP), que podría servir para "crear una cultura común de ahorro e inversión a largo plazo en toda la Unión, o al menos, una más similar".
En cuanto al "brexit", el presidente de la CNMV ha precisado que "obliga a los Estados miembros y a las instituciones de la Unión a hacer un esfuerzo adicional para asegurar un mercado de capitales europeo eficiente y capaz de competir internacionalmente con éxito", con independencia de como se resuelva este proceso.
Sin embargo, ha advertido que el "brexit" sitúa a Europa ante un "riesgo de competencia regulatoria a la baja por parte del Reino Unido una vez que esté fuera de la Unión".
Esto "puede resultar chocante o paradójico, en su opinión, ya que el Reino Unido ha sido el gran promotor de la regulación europea" en los mercados de capitales, y los "aciertos y errores" de la normativa europea "son en gran medida un legado británico".
El discurso de Albella ha versado en gran medida sobre las próximas fases del proyecto europeo de Unión de los Mercados de Capitales (CMU, según siglas inglesas), y ha dedicado una buena parte a la conveniencia de estimular la financiación de las empresas a través de los mercados.
Así, ha precisado que la CMU ha hecho "algunos esfuerzos para simplificar la regulación en puntos concretos con este objetivo, pero no es suficiente".
Entre otros motivos, ha comentado que así se logra un "mayor desarrollo del mercado de capitales" y se equilibra el menú de financiación (bancaria y mercados).
Además, para Albella, cotizar en los mercados implica "más transparencia", profesionaliza la gestión, lo que "impulsa el crecimiento y ambición de las empresas".
El responsable del organismo supervisor ha lamentado la actual "fase de escasez de salidas a bolsa", que ha relacionado con la situación de los mercados, afectados por incertidumbres diversos motivos, como el "ambiente de fin de ciclo, "brexit", negociaciones comerciales entre China y Estados Unidos, incertidumbres geopolíticas, entres otras."
Además, ha añadido "la competencia del capital riesgo y en general del capital privado, un fenómeno que tiene aspectos muy positivos, que ha tenido, también en Europa, un gran desarrollo en los últimos años y que determina que muchas empresas no opten por cotizar o retrasen el momento".