Zagreb, 20 dic (EFE).- Los dos mayores bancos de Eslovenia, en gran parte de propiedad pública, han comenzado hoy a transferir a un "banco malo" parte de los activos tóxicos que lastran al sector, dentro de la operación de saneamiento diseñada por el Gobierno y aprobada por la Comisión Europea.
Uno de estos dos bancos, el NLB (Nova Ljubljanska Banka), comunicó que la transferencia del primer paquete de activos terminará hoy y que el banco recibirá a cambio títulos de crédito con garantías estatales.
En este primer envío de "activos tóxicos" participan NLB y NKBM (Nova Kreditna Banka Maribor), que esta semana han sido recapitalizados con 1.551 millones y 870 millones de euros, respectivamente.
En total, alrededor de 3.500 millones de euros en "activos tóxicos" serán transferidos en cinco tramos hasta fin de abril desde estos dos bancos a la "Sociedad para gestión de los activos de los bancos" (DUTB), creada para gestionar los activos tóxicos.
Este "banco malo" podría recibir durante todo el proceso unos 4.000 de los 8.000 millones de euros de activos conflictivos que agobian al sector en Eslovenia, y que equivalen a un 25 por ciento de la economía del país.
Además de los dos grandes bancos, otra entidad, "Abanka" comenzará a transferir sus activos problemáticos una vez presentado su plan de reestructuración, en el que se incluye una recapitalización de 348 millones de euros.
Otros dos bancos, "Factor Banka" y "Probanka" serán cerrados conforme el plan aprobado por la Comisión Europea.
Los test de estrés solicitados por la CE evaluaron la semana pasada en 4.4778 millones el tamaño del agujero financiero del sector bancario esloveno.
Esa cantidad entra dentro de los límites en los que Eslovenia puede hacer frente al rescate bancario sin ayuda exterior.
La noticia de que el país no tendrá que recibir asistencia del Eurogrupo ha relajado la presión sobre la rentabilidad de la deuda eslovena, cuyo bono diez años cayó el miércoles por debajo del 5 por ciento por primera vez en nueve meses.
Según el ministro de Finanzas, Uros Cufer, el banco NKBM será completamente privatizado hasta fin de 2016, mientras que el Estado disminuirá su participación en el NLB hasta fin de 2017 al 25 por ciento, más una acción.
El saneamiento del sector bancario es visto como una condición esencial para la recuperación de la economía eslovena, que este año sufrirá una nueva contracción, del 2,4 por ciento, mientras que la tasa de paro supera el 11 por ciento. EFE