Mérida, 7 mar (.).- El director ejecutivo de Cristian Lay, Miguel Angel Leal, asegura que, seis meses después de formalizarse la compra del grupo siderúrgico Gallardo Balboa, se han despejado incertidumbres y "hay mucho futuro", como demuestra que estén en funcionamiento todas las plantas que estaban abiertas antes de la pandemia y que se estudie la viabilidad de reabrir la de Azpeitia (Guipúzcoa).
En una entrevista con Efe, Leal, que junto a su padre y hermanos dirige este grupo industrial con sede en Jerez de los Caballeros (Badajoz) y con presencia en 24 países, ha recordado que cuando se hicieron cargo de Gallardo, también con sede en este municipio, solo funcionaban dos de las empresas (Balboa y Corrugados Lasao).
"Pueden venir mal dadas, que haya un cataclismo o un modelo que se caiga porque se deje de consumir acero, pero en circunstancias normales, el grupo tiene mucho futuro", asevera.
Reconoce que 2021 será "muy exigente", pero está satisfecho de como va el año, con una producción "a niveles muy altos", y defiende la "cultura de empresa" de que "nunca se termina nada, donde se termina hoy, mañana se puede estar un poco más adelante", pero para ello hay que hacer las cosas bien, tener la gente adecuada y poner los medios.
En este sentido, está contento con la manera en la que se está llevando a cabo el proceso de integración de los trabajadores del Grupo Gallardo en este proyecto, y cree que la clave está en que "todo el mundo quería ver más movimiento, ver que la empresa tenía futuro" y en ese objetivo se está: ir viendo las oportunidades de mejora y de inversión, de como mejorar los procesos productivos.
En esa estrategia entraría el futuro de Corrugados Azpeitia, unas instalaciones cerradas desde hace 8 años y sobre la que se están haciendo "estudios preliminares", para saber si es posible abrirlas de nuevo o no.
Según Leal, como ocurre con otros activos del grupo, como Galvacolor, la intención es ver por donde se puede seguir mejorando.