MADRID (Reuters) - El grupo aceitero Deoleo (MC:OLEO) amplió las pérdidas en los primeros nueve meses del año, con un quebranto de 26,8 millones de euros que atribuyó en gran medida a los gastos derivados de la remodelación de actividades mientras avanza en su objetivo de mejorar la rentabilidad.
Los gastos no recurrentes ascendieron a 26,2 millones de euros, fundamentalmente por "la crisis de calidad en Italia y el rediseño integral de productos, procesos, sistemas y estructura".
La empresa, propietaria de tres de las cuatro principales marcas de aceite de oliva, la española Carbonell y las italianas Bertolli y Carapelli, redujo sus ventas a septiembre un 17 por ciento a 520 millones de euros mientras se concentra en los negocios de mayores márgenes y lidia con un constante descenso del consumo en España e Italia.
De hecho, pese al descenso de las ventas, el resultado bruto de explotación (ebitda) mejoró un 19 por ciento a 38 millones de euros, con un incremento de los márgenes hasta el 7,3 por ciento desde el 5,1 por ciento de hace un año.
Deoleo, que el viernes pasado anunció el cierre de una planta en Italia y la venta de otra en Málaga con recortes de personal incluidos, espera que la próxima cosecha sea similar a la de la campaña anterior, entre 1,4 y 1,5 millones de toneladas, y con disponibilidades suficientes.
Con un crecimiento del 4,5 por ciento en la deuda financiera neta hasta los 547,9 millones de euros, el grupo se mostró convencido en que cerrará el año con un "crecimiento relevante" del ebitda respecto a 2015.
Añadió que las medidas de eficiencia y gestión de aprovisionamientos para la próxima campaña "darán lugar a inversiones adicionales, cuyos efectos han sido contemplados en nuestras estimaciones financieras".