San José, 6 nov (EFE).- La desigualdad social aumenta sin parar en Costa Rica a pesar de los buenos resultados económicos y así, el 20 % más rico de la población tuvo en 2011 ingresos 18,2 veces superiores a los del 20 % más pobre, según un informe publicado hoy.
El Informe del Estado de la Nación, una especie de radiografía que desde hace 18 años es elaborada anualmente por un grupo de académicos y especialistas, muestra una profundización de la desigualdad y un estancamiento del nivel de pobreza en el país.
"En el 2011, la pobreza afectó al 21,6 % de los hogares y fue similar a la reportada en 2010 (21,3 %). Esto significa que prevalece el estancamiento relativo de este flagelo que se viene registrando desde 1994", señala el texto.
En cuanto a la desigualdad señala que los beneficios de la bonanza económica se concentran en los sectores más ricos.
Si en 2010 los ingresos del 20 % más adinerado eran 16,7 veces mayores a los del 20 % más pobre y en 2011 fueron 18,2 veces.
Para los especialistas del Proyecto del Estado de la Nación, el año pasado Costa Rica se caracterizó por un "moderado crecimiento y estabilidad monetaria, pero una gestión ambiental, una sociedad y un sistema político en serios problemas".
El 2011, subraya el informe, fue "un año más en el que el estilo de desarrollo y la democracia costarricenses no lograron avances firmes en el desarrollo humano de la población" y más bien, la desigualdad creciente "erosiona la integración social del país" levantando "barreras cada vez más difíciles de superar entre grupos y sectores".
El estudio señala que por ejemplo, la escolaridad promedio de la población costarricense de 18 a 64 años es de 8,9 años, pero que ésta avanzó menos de 2 años en las últimas dos décadas.
Además, solo el 42,1 % de la población de 25 a 39 años tiene secundaria completa en el país.
La situación se dificulta pues la inversión social pública real cayó un 0,5 % en 2010 y 2011, quebrando así la tendencia alcista que se venía observando desde el año 2006.
Los programas universales dirigidos a toda la población mostraron una contracción real del 4,6 % por persona en 2010 y 2011, lo que golpea especialmente a los sectores más humildes. EFE