Investing.com - Este ha sido un martes negro para los mercados, y en particular para el Ibex. El selectivo español ha entrado en negativo en el año. En lo que va de 2013, acumula un retroceso del 0,85% después de una sesión cuesta abajo y sin frenos en la que ha caído un 1,68%, al cierre, aunque el retroceso ha llegado acercarse al 3% en algunos momentos de la sesión. Ha perdido los 8.200 puntos y los 8.100, pero ha logrado salvar los 8.000. Mañana partirá de 8.089 puntos.
También Wall Street cae con fuerza desde la apertura, como ya hizo horas antes el Nikkei. Y es que a los mercados les está sentando muy mal la falta de concreción de bancos centrales como la Fed, respecto a su programa de estímulos monetarios, y el BoJ, que esta noche ha anunciado que mantiene sus actuales medidas de flexibilización monetaria pero no ha adelantado, por el momento, medidas para limitar la volatilidad en los rendimientos de los bonos de deuda pública, tal y como esperaban muchos analistas.
La atención sigue muy centrada en los datos macroeconómicos de Estados Unidos. Hoy se ha publicado el de los inventarios al por mayor, cuya evolución en abril se ajustó a las previsiones: repuntaron un 0,2%, hasta 504.800 millones de dólares.
En el Viejo Continente, el foco de atención estaba en Alemania porque el Tribunal Constitucional del país ha empezado su vista oral para evaluar si el programa de compra de bonos soberanos anunciado el año pasado por el BCE viola la Carta Magna germana. No se espera que sea hasta finales de septiembre cuando el alto tribunal determine si, como alega el recurso suscrito por más de 37.000 ciudadanos alemanes, la medida propuesta por el presidente de la institución, Mario Draghi, excede el mandato de la autoridad monetaria e invade competencias nacionales. En ese sentido, la canciller Angela Merkel ha afirmado hoy confiar en que el Tribunal dictamine que el programa de compra de deuda es acorde con la Constitución.
Del mismo modo que el mero anuncio de esta iniciativa por parte de Draghi el pasado verano ya sirvió para relajar notablemente las primas de riesgo de países como España e Italia, ahora que el Alto Tribunal alemán está poniendo este programa en entredicho se está produciendo el efecto contrario. El diferencial español se ha disparado en el mercado secundario hasta superar holgadamente los 300 puntos básicos. Ha llegado a alcanzar los 313, y al cierre de mercados se ha relajado ligeramente hasta 305. Y la rentabilidad del bono a 10 años, que había llegado al 4,75%, se coloca en el 4,65%. También la prima de riesgo italiana ha aumentado considerablemente, hasta cerrar en 276 puntos.
Sólo dos valores del Ibex han cerrado en positivo: Amadeus, que se anota un 1,69% y, a mucha distancia, Viscofan, un 0,61%. El farolillo rojo es para IAG, que se deja un 4,26%. Con mucha fuerza han caído también Mapfre, un 3,99%, OHL, un 3,18% y Banco Popular, un 3,17%.
Después de Madrid, Milán es el que más ha caído de los principales parqués del Viejo Continente. El FSTE MIB ha retrocedido un 1,63%. El francés Cac recorta un 1,39%, el FTSE londinense un 0,94% y el Dax alemán un 1,03%.