(Reuters) - La decisión de la familia francesa Arnault de deshacerse de gran parte de sus acciones en DIA (MADRID:DIDA) no constituyó una gran sorpresa en el mundo financiero, pero tuvo un impacto negativo el martes en la cotización en bolsa de la distribuidora española.
Citigroup (NYSE:C) anunció la víspera que había recibido el mandato para colocar un 8,48 por ciento de la cadena de supermercados en manos de Cervinia Europe y Blue Partners, vehículos inversores del grupo francés Arnault, accionista de la firma de lujo Louis Vuitton LVMH (PARIS:LVMH).
El martes, el banco anglosajón dio por concluida la colocación de los 55,2 millones de títulos a un precio de 7,40 euros por acción, un descuento del 2,8 por ciento sobre el precio de cierre anterior.
No obstante, algunos operadores dijeron que la transacción puede haber tropezado con obstáculos ya que el banco colocador admitió que activó el compromiso de aseguramiento en esta operación, valorada en 408 millones de euros.
"Eso puede significar que Citigroup no ha vendido todas las acciones sino que se ha quedado con algunas o con muchas", dijo un operador en Madrid.
A las 1040 horas, las acciones de DIA bajaban un 3,0 por ciento a 7,38 euros en un mercado alcista.
"La noticia (de la desinversión) debería presionar sobre la cotización de DIA", dijo la sociedad de valores Bryan, Garnier & Co.
No obstante, el broker anglosajón señaló que era normal que los dos fondos inversores sacaran provecho de su participación dada la fuerte revalorización de las acciones de la cadena de supermercados.
Durante los cuatro años en los que Blue Partners y Cervinia han formado parte del accionariado de DIA, el valor en bolsa de la empresa se ha duplicado, centrándose la revalorización en los últimos ocho meses (+70 por ciento).
Tras la desinversión Blue Partners y Cervinia aún ostentan más de tres millones de acciones de DIA, de acuerdo con los registros de la CNMV.
El principal accionista es Baillie Gifford, con un 10,02 por ciento, seguido por Blackrock, con un 3,1 por ciento, según el registro oficial.
"La bolsa española se ha vuelto muy cara y esto se refleja en el aumento del número de colocaciones", dijo un gestor de un broker extranjero en Madrid.