Madrid, 31 ene (.).- La sociedad de valores Diaphanum apostará este año por el 'private equity' (capital privado o capital inversión) y por las infraestructuras, mantendrá posiciones en deuda privada, en concreto en la 'senior' (la más segura), y adoptará una actitud de cautela en el sector inmobiliario.
Diaphanum, que ha presentado hoy su estrategia en el ámbito de los activos ilíquidos (que son más difíciles de convertir en efectivo), espera una relajación de la política monetaria en el segundo semestre del año y una desaceleración más pronunciada en Europa que en EE.UU.
La sociedad de valores empezó a invertir el año pasado en activos ilíquidos (empresas, deuda privada, infraestructuras e inmuebles).
Según ha explicado Hugo Aramburu, socio director de Diaphanum, en un encuentro informativo, la sociedad de valores es "algo menos optimista" que el mercado sobre la fecha en la que los principales bancos centrales empezarán a recortar los tipos de interés.
En su opinión, los bancos centrales serán "cautos" y no abordarán los primeros recortes hasta la segunda mitad del año, es decir, no en abril o mayo.
En cuanto a la evolución de las principales economías, José Cloquell, director del Departamento de Inversiones Ilíquidas, espera "un mundo a varias velocidades", con una desaceleración "más aguda" en Europa que en EE.UU. y en Japón.
Diaphanum considera que la estabilización de la inflación y la normalización de la política monetaria proporcionarán una "mayor visibilidad" para acometer inversiones y desinversiones.
No obstante, a su juicio, persisten una serie de riesgos, entre ellos posibles conflictos geopolíticos y eventuales guerras comerciales que podrían provocar un repunte de la inflación y condicionar la política monetaria.
En este contexto, Diaphanum cree que es momento de invertir en 'private equity'.
"Nuestra preferencia son pequeñas y medianas compañías con sólidos balances y necesidades de capital para ejecutar planes de crecimiento o profesionalizar el negocio", ha precisado Cloquell.
En el caso del 'venture capital', que implica invertir en empresas en estadios más iniciales de crecimiento, Diaphanum tomará una postura menos cautelosa que en 2023, teniendo en cuenta los ajustes de valoración que se han producido, aunque seguirá siendo prudente.
La entidad continúa atenta a las oportunidades de inversión en infraestructuras, un activo que gusta a sus gestores.
Diaphanum también seguirá de cerca las opciones en deuda privada, sobre todo para los nuevos clientes.
En el ámbito inmobiliario, la sociedad de valores cree que solo algunos nichos del mercado reúnen las condiciones para invertir.
Diaphanum elevó el año pasado un 32 % el volumen de activos bajo gestión, que asciende ya a 3.000 millones de euros, según ha detallado Aramburu.
La sociedad de valores cuenta con más de 2.000 clientes y nueve centros de negocio.
Aramburu ha señalado que la entidad está abierta a analizar posibles oportunidades para crecer mediante compras.